Cumbre de la Sociedad de Información
JOAQUÍN RIVERY TUR
¿Qué es la Sociedad
de Información?
Esta pregunta no tiene
una respuesta difícil si nos basamos en lo que vemos todos los
días prácticamente en cualquier esfera de la vida. No es
concebible ninguna actividad sin la información, por cualquiera de
las vías por las que ella transcurre. Con la información nos
topamos cuando encendemos la televisión, cuando manejamos una
computadora, cuando leemos un periódico, cuando hurgamos en libros
o manuales los textos que nos hacen falta para una cosa u otra, e
incluso cuando transmitimos verbalmente a otra persona datos,
recados e incluso órdenes.
Con el desarrollo de la
ciencia y la técnica nos hemos encontrado de pronto en un mundo
donde priman las Tecnologías de la Información y la Comunicación
(TIC, las llaman los expertos). Actualmente, prácticamente una
parte del planeta vive inmersa en estas tecnologías y pasa una
buena parte del tiempo empleándolas de una forma u otra.
¿Todo el mundo tiene
acceso a estas nuevas tecnologías?
No exactamente. El
despliegue de estas tecnologías de punta ha sido privilegio de los
países más desarrollados, mientras las naciones atrasadas, las
pobres, no han tenido los recursos suficientes para que llegue a
todos los lugares.
En primer lugar, debemos
recordar que 2 000 millones de personas en el planeta no tienen
acceso a la electricidad, y sin la fuente de energía, ¿cómo van a
ver televisión, pasar un E-mail o enlazarse con Internet? Esas
personas se encuentran concentradas en un Tercer Mundo, donde a
veces hasta se ignora la existencia de las TIC en los sitios más
recónditos.
No se puede decir que
los más de 800 millones de analfabetos vivan sin electricidad, pero
viven sin información ninguna, pues no tienen ninguna posibilidad
de leer ningún mensaje informativo, aunque esté impreso en las
letras mayores posibles. Solamente pueden captar información por la
vía auditiva. Y no podemos olvidar que los pregoneros del
neoliberalismo están muy interesados en mantener la ignorancia.
Por otra parte, si en la
Tierra hay ya 500 millones de usuarios de Internet, eso significa
que más del 90% de la población del planeta no ha "navegado"
nunca por el ciberespacio, y que esa posibilidad está concentrada
en un pequeño número de países del Norte.
¿Qué es la Cumbre
de la Sociedad de Información?
Se trata de un gran
evento convocado por las Naciones Unidas con el propósito de
facilitar el desarrollo efectivo de una sociedad muy informatizada y
ayudar a colmar la brecha de tecnología digital que existe entre
las naciones, como ya vimos.
Su nacimiento se puede
situar en el 21 de diciembre del 2001, cuando la Asamblea General de
la ONU adoptó la Resolución 56/183 para convocar la Cumbre Mundial
sobre la Sociedad de la Información, planificada en dos fases: en
el 2003 en Ginebra, Suiza, y en el 2005 en Túnez.
Según se previó, la
primera fase de la Cumbre, que tendrá lugar del 10 al 12 de
diciembre próximo, deberá adoptar una Declaración de Principios y
un Plan de Acción con la ya anunciada meta de reducir el abismo
entre los países pobres y ricos mediante el análisis de todos los
temas que guardan relación con la sociedad de información, y se
espera la participación de algunas decenas de jefes de Estado o
Gobierno.
La segunda parte será
como un seguimiento de la primera, se efectuará en Túnez del 16 al
18 de noviembre del 2005 para profundizar en la aplicación de los
dos grandes documentos que se deben aprobar en la fase inicial.
¿Hay discrepancias
entre los países?
A pocos días de abrirse
las puertas de la Cumbre de la Sociedad de Información, los dos
documentos básicos del evento no están listos. Según Mark Furrer,
secretario de Comunicaciones de Suiza, las discrepancias abarcan al
85% de los textos.
Por ejemplo, la
creación de un fondo para mitigar las diferencias entre naciones
atrasadas y países ricos son un punto donde no hay acuerdo ninguno.
Esos desencuentros
también alcanzan al papel de los medios de comunicación, el
gobierno de Internet, los límites de la propiedad intelectual, los
derechos de autor y otros tópicos, sin contar con el financiamiento
de las infraestructuras de información y telecomunicaciones en los
países subdesarrollados, donde los del Norte insisten en aplicar
las reglas del neoliberalismo.
¿Puede Cuba aportar
algo en este evento?
Las experiencias de Cuba
—que, además de las plenarias, participará en la Mesa Redonda
número tres: Las TIC, una herramienta para alcanzar los objetivos
de desarrollo del milenio— podrían ser valiosísimas hasta para
los países industrializados.
El empleo de la
computación en la enseñanza de todos los niveles, sobre todo en
primaria y secundaria, utilizando una cantidad mínima de recursos
podría ser un buen ejemplo para muchos. Solo en primaria la
Revolución ha instalado 24 000 computadoras (17 con un solo alumno
y 75 con dos educandos) y casi 23 000 más en otros tipos de
enseñanza, con el consiguiente esfuerzo en la preparación de los
docentes y el adiestramiento de los maestros y profesores normales,
que requerían estar por lo menos al nivel de los alumnos.
En toda la enseñanza se
introdujo la norma de no más de 20 alumnos por aula (15 en
secundaria) y en todas las aulas se instaló un televisor y una
videocasetera (a algunas, dos). Las sesiones por televisión y la
computadora hacen un complemento magnífico para la interacción con
los alumnos, pues en las simples clases curriculares por televisión
los alumnos se veían en un papel pasivo.
El plan de los Joven
Club suma 300 en todo el territorio nacional, además de cuatro
laboratorios móviles y cuatro palacios de Computación en los que
el número de máquinas es siempre superior a 30. Todos se están
interconectando y ya tienen en su haber casi 600 000 graduados desde
que se inició este plan. Con los 300 existentes se pueden graduar
120 alumnos cada año en dos ciclos de cuatro meses cada uno y la
intención es duplicar el número de Joven Club en el país.
Otro aspecto destacable
en Cuba es la red telemática de Infomed, de nivel nacional, que se
extiende para enlazar a todos los centros de Salud, a los que les
brinda todos los servicios posibles de las bibliotecas.
Se debe tener en cuenta
que todos los usuarios de Infomed están provistos de mensajería
electrónica internacional y muchos de los centros interconectados
tienen ya un acceso a Internet que se va ampliando rápidamente.
En resumen, Cuba puede
ofrecer ejemplos de creación de condiciones para desarrollar la
llamada sociedad de información de alcance verdaderamente social,
partiendo precisamente de los más jóvenes, aquellos que en el
futuro manejarán máquinas y redes y gobernarán el país, pero con
un gran énfasis en la ética de la enseñanza, sin olvidar el
internacionalismo que ha caracterizado a la Revolución durante más
de cuarenta años y que es una de sus banderas distintivas. |