PANAMÁ, 21 de noviembre (PL).—
Si las grandes disputas internacionales giran hoy alrededor del petróleo,
en el futuro las reservas de agua tendrán similar trascendencia, a
juzgar por las atentas miradas a los recursos hídricos de Centroamérica
y el Caribe.
La II Feria del Agua de la zona, que
virtualmente comenzó este viernes en Panamá y contempla una serie
de eventos internacionales a partir del lunes venidero, despertó
especial interés de organismos de Naciones Unidas, la Unión
Europea (UE) y Estados Unidos.
Bajo la presidencia del Centro del
Agua del Trópico Húmedo para América Latina y el Caribe
(Cathalac), encabezada por el señor Emilio Sempris, delegados de más
de 25 países expondrán en los próximos días asuntos relativos al
líquido vital como fuente primordial del desarrollo sostenible.
Según conoció Prensa Latina del
comité organizador, la cita de carácter científico constará de
encuentros del 24 al 26 en el nivel de expertos, la II Cumbre
Ministerial del Agua, el propio día 26, y de un Seminario Regional
sobre cooperación internacional para desastres el 27 y 28.
Llama la atención el hecho de que en
las reuniones tomarán parte especialistas de la UE y del secretario
adjunto del Departamento de Estado para asuntos de océanos,
ambiente y ciencia de Estados Unidos, Anthony Rock.
De acuerdo con el Administrador
General de la Autoridad Nacional del Ambiente en Panamá, Ricardo
Anguizola, el interés en estos asuntos se relaciona con la enorme
disponibilidad de agua del Caribe, con una superficie territorial de
269 mil kilómetros cuadrados, y Centroamérica, con 807 mil.
La zona recibe una precipitación
anual comparativamente alta y el agua dulce es un elemento abundante
en la subregión salvo contadas excepciones.
Recién comienzan nuestros pueblos a
apreciar que sus mayores riquezas y ventajas radican en su
extraordinaria biodiversidad, señaló Anguizola.
En el proyecto de documento de
trabajo de los delegados a estos foros, se subraya que la nueva
cultura del agua procura gestar una nueva alianza de los seres
humanos con el líquido vital y recalca que la disponibilidad de
recursos hídricos no constituye por sí misma una garantía de
desarrollo.
Indica que la crisis del agua afecta
en primer lugar a los pobres y expone que las prioridades de
Centroamérica y el Caribe deben concentrarse en la preservación,
sistematización, manejo y diseminación de conocimientos para una Girh
(Gestión Integrada de los Recursos Hídricos).
Representantes de la Comunidad del
Caribe (Caricom), Unicef,
Cepal, OPS, PNUD, PNUMA, FAO y de Universidades del
continente y otras latitudes intervendrán en las discusiones de
estos días en Panamá.
Entre las cuestiones que se habrán
de debatir sobresalen Gobernabilidad: organismos de Cuenca y gestión
de conflictos por el agua; Salud Pública y Seguridad Alimentaria;
Gestión de riesgos y adaptación de sistemas hídricos al cambio
climático; e Instrumentos para la Girh.