A 20 años de su creación el programa cubano de prevención de cáncer bucal, extendido a la comunidad, es único de su tipo en el mundo y reconocido por la Organización Mundial de la Salud.

En declaraciones exclusivas a la AIN, el doctor Julio César Santana Garay, presidente de la Comisión Nacional de ese proyecto, destacó entre los logros el decrecimiento de un 10 por ciento de la mortalidad por cáncer del labio, encía, suelo de la boca y la lengua.

Desde su inicio en 1983, ese programa es ejecutado por estomatólogos, fundamentalmente de atención primaria, aunque también participan especialistas, y está relacionado con el Médico y la Enfermera de la Familia, quienes realizan exámenes sistemáticos del complejo bucal.

El profesor Emérito de la Universidad Médica de La Habana explicó que Cuba ha extendido las experiencias a otros países de Latinoamérica, como México, Bolivia y Argentina.

Santana Garay insistió en la importancia del autoexamen bucal, al menos cada seis meses, y ante cualquier alteración (manchas blancas, rojas o de otro color, aumento de tamaño de tejido blando o duro, úlcera o alguna dureza), se debe consultar al estomatólogo o al Médico de la Familia.

El doctor en Ciencias recabó la eliminación de los estados y lesiones premalignas, es decir, aquellas que están antes del cáncer, pues al erradicarlas se evita el desarrollo de las malignidades bucales.

Enfatizó en las personas de alto riesgo que fuman mucho, ingieren bebidas alcohólicas o no practican una buena higiene bucal, quienes deben ser los primeros en la minuciosa revisión de su boca.

El especialista escribió el libro "Prevención y Diagnóstico del Cáncer Bucal", como apoyo a estomatólogos y Médicos de la Familia para que cuenten con un instrumento de trabajo y puedan ejecutar con más precisión este programa.

En el mundo y en Cuba el cáncer constituye la segunda causa de muerte, antecedida por las enfermedades cardiovasculares. Actualmente suman al año más de 10 millones de muertes en el orbe.