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Mahatir Mohamad Político consecuente ARNALDO MUSA Un hombre de principios, enemigo de las injusticias y con los pies bien puestos sobre la Tierra, Mahathir Mohamad, deja su cargo de primer ministro este 31 de octubre con la frente bien alta, por la consecuencia que acompañó sus actos durante los años que ocupó el premierato, desde 1981, en Malasia. Mahathir Mohamad, también presidente de la Organización Nacional para la Unidad Malaya (UNMO), el mayor partido de la coalición de 14 agrupaciones que gobierna a Malasia, declaró que, no obstante, continuará sirviendo a su formación durante las próximas elecciones generales, previstas para el 2004. El Primer Ministro de Malasia soportó todas las presiones para que claudicara en la defensa de su nación ante las ansias hegemónicas de Estados Unidos y las maniobras envolventes de sus principales instrumentos económicos neoliberales, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, al tiempo que se pretendió hacerle abdicar de sus ideas sobre el No Alineamiento y de sus lazos de amistad con Fidel y la Cuba revolucionaria. Hace unos pocos meses en Kuala Lumpur, el 25 de febrero, felicitó a Fidel, como no había hecho con ningún otro dignatario, por su "breve y sustancioso" discurso pronunciado en la XIII Cumbre de los No Alineados. En ese entonces, al agradecer nuestro Comandante en Jefe la confianza depositada en Cuba para designarla como sede de la próxima Cumbre de los NOAL, destacó el liderazgo del Primer Ministro malasio, quien, recordó, "supo ganar la gloria y prestigio cuando, frente a la grave crisis del Sudeste Asiático, vislumbró caminos nuevos y desafió con audacia métodos odiosos e instituciones temibles". Estas posiciones de Mahathir se vislumbraban desde antes de asumir el premierato malasio, al desempeñarse en diversas esferas del Gabinete, principalmente en la educación, el comercio y la industria. Conocida es su postura de llevar la educación y la cultura hasta el último rincón de Malasia, su ambicioso plan de que cada habitante esté libre del hambre y tenga una vida lo más cómoda posible. Ya en las vísperas de su retiro, el imperialismo y los medios de comunicación que lo secundan no han dejado de calumniar a Mahathir, a quien acusaron falsamente de haber pronunciado un discurso en la Cumbre de la Organización de la Conferencia Islámica, en Kuala Lumpur, en el cual exhortaba al exterminio de los israelíes, en evidente distorsión de su llamado a defender la existencia de los palestinos, uno de los motivos por los que fue creada la institución. |
