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SIGFREDO BARROS
Todavía no se ha
apagado el eco de los comentarios alrededor del espectacular partido
Cuba-Brasil, con el cual cerró la fatídica y siempre temida
jornada de muerte súbita. Jugado impecablemente —sin la sombra de
un error—, y un tremendo dominio del pitcheo: 24 de los 51 outs
fueron marcados en las hojas de anotación con una K, símbolo del
ponche, y solo siete fueron realizados por los jardineros. Todo el
mundo se pregunta cómo ha sido posible que este país sudamericano
haya dejado en el camino a naciones de mayor tradición en el
béisbol como México y Holanda y haya sido capaz de colocarse a
solo tres outs de conseguir una hazaña frente a los 23 veces
campeones mundiales. La razón es muy sencilla, si nos guiamos por
las declaraciones de Jorge Otsuka, presidente de la Confederación
de este deporte en Brasil, quien aún con la emoción reflejada en
el rostro después de ver a sus compatriotas pelear out por out,
declaró que gracias a la ayuda prestada por los técnicos cubanos
ha sido posible ese desarrollo. Rodolfo Puente trabajó allá varias
temporadas, el actual entrenador de pitcheo del conjunto es Omar
Carrero y en la recién fundada Academia de Béisbol laboran dos
glorias de nuestra pelota, Jorge Luis Valdés y Lázaro Vargas.
Además, varios jugadores brasileños juegan en Japón: Kleber Ojima
con el Mitsubishi, Rodrigo Miyamoto en la misma escuadra donde
militan Germán Mesa y Luis Ulacia, y Norberto Rocha es compañero
de Omar Linares en los Dragones de Chunichi. Brasil, un gigante de
más de 150 millones de habitantes, por poco desplaza a Canadá del
tercer lugar en los Juegos Panamericanos. Y ahora pueden afirmar que
juegan mejor a la pelota que nosotros al fútbol.
MINIENTREVISTAS
Vinimos a Cuba a
ganar, somos profesionales, no turistas. Y ahora no tenemos otra
meta que no sea la de llevarnos el oro para celebrar los 100 años
de béisbol en mi país. Para la final aún no tengo decidido el
lanzador abridor, pero puedes escribir que todo el mundo estará
listo para salir al box. (Omar Moreno, mentor de Panamá).
No, no salí a dar un
batazo grande. Moreno me dijo que solo tratara de hacer contacto. El
jonrón salió, le di con fuerza a una slider que se le quedó alta
al pitcher japonés. (Rubén Rivera, cuarto bate panameño).
Control, rectas en la
zona de adentro, combinadas con la slider, la curva y el cambio. Esa
fue la base de mi pitcheo, todo tirado en la zona baja porque ellos
son bateadores de swines rectos. Tengo 29 años, jugué con los
Marlins de la Florida y ahora milito en la sucursal Triple A de los
Orioles. (Rafael Medina, el lanzador que derrotó a Japón).
RÁPIDAS:
Las dos próximas
Copas del Mundo tendrán por escenario a Holanda en el 2005 y Taipei
de China en el 2007... Panamá fue medalla de bronce en
Venezuela-45 y Cuba-52...Y... sí, se lo imaginan, ¡el espacio
dijo hasta aquí! Nos vemos en el estadio. |