BOGOTÁ, 29 de septiembre (PL).—
Ocho muertos y más de 2 500 damnificados dejan hoy las lluvias
que caen insistentemente sobre buena parte del noroeste departamento
colombiano de Antioquia y otros territorios cercanos.
Un reporte desde Medellín, capital
de Antioquia, indica que las inundaciones y deslizamientos de tierra
en la comuna nororiental de esa urbe provocaron la muerte de seis
personas (tres menores y tres adultos) y de otras dos por
ahogamiento en el municipio de Anorí.
Debido a las pésimas condiciones
meteorológicas, asociadas a un invierno muy lluvioso, el Sistema
Municipal de Prevención y Atención de Desastres (SIMPAD), de la
Alcaldía de Medellín, indicó que otros 297 antioqueños quedaron
sin hogar.
Añade el reporte del SIMPAD que las
situaciones más graves se reportaron en las laderas de los barrios
Santo Domingo Savio, San Pablo, El Trébol y Campo Valdés.
Asimismo, el desbordamiento del río
Nechí, en el municipio de Zaragoza, Antioquia, causó otros
1 600 damnificados, por lo que las autoridades locales
decretaron el estado de alerta y solicitaron ayuda en mantas,
alimentos, ropa y colchones para atender a los afectados.
En el corregimiento de Liberia, en el
municipio de Anorí, prosigue el SIMPAD, el mismo río Nechí
destruyó 12 casas, dañó otras 87 y dejó 450 damnificados,
mientras en el municipio de Urabá, una borrasca produjo 127
afectados.
Aunque Antioquia resulta hasta ahora
el territorio más golpeado por las intensas precipitaciones de los
últimos días, otros departamentos como el noroeste de Sucre y el
oriental de Casanare también han sufrido las consecuencias de la
ola invernal, que de acuerdo con los pronósticos se extenderá por
dos meses más.