KABUL, 11 de septiembre (PL). —
Afganistán vive un proceso que podría conducir hacia la creación
de carteles de la droga, como el de Medellín, alertó un
funcionario de la ONU, en declaraciones dadas a conocer hoy aquí.
Antonio María Costa, director de la
Oficina contra la Droga y el Crimen de la Organización de Naciones
Unidas, calificó la situación en Afganistán de alarmante y muy
peligrosa.
Aseguró que la mayoría de los
"señores de la guerra", que apoyaron a Estados Unidos en
su agresión contra el territorio afgano, están implicados en el
narcotráfico y destinan parte de sus ingresos a la compra de
armamentos y la ampliación de sus milicias.
El funcionario de la ONU reveló que
en el 2002 el negocio de las drogas dejó ganancias a los
narcotraficantes por valor de 2 500 millones de dólares.
Esa cantidad —dijo— contrasta con
los 1 300 millones de dólares que la comunidad internacional
destinó el pasado año a ayudar al país centro asiático.
Según datos de la Organización de
Naciones Unidas, en el 2001 el régimen talibán logró reducir a
185 toneladas la cosecha de opio, materia prima para la elaboración
de la heroína.
Sin embargo, después de la guerra de
agresión de Estados Unidos y sus aliados, el cultivo de esa planta
se disparó de manera alarmante, hasta alcanzar las 3 400
toneladas en el 2002, cifra que se incrementará en un 20 por ciento
este año.
"Es necesario empezar a frenar
este proceso de gangrena", dijo el director de la oficina
antidrogas de la ONU.