LA HABANA.— La afición deportiva cubana siguió
en vivo este sábado por vez primera las incidencias de un partido
de la Copa Oro de fútbol, pero fue como un balde de agua fría.
Su selección, después de haber conseguido la
clasificación para la segunda ronda —un hecho inédito en sus
tres participaciones en estos clásicos—, tuvo que enfrentarse al
equipo de Estados Unidos, en Boston, uno de los conjuntos favoritos,
del que recibió la goleada del torneo: 5-0.
Los diarios nacionales de nuestro país fueron
realistas e incluso este rotativo Granma ya calificaba en la
víspera de "favorito" a EE.UU., para evitar crear una
falsa expectativa, toda vez que el "once" de las barras y
las estrellas es muy superior en todos los órdenes al cubano.
El partido, que dio al primer semifinalista del
certamen y que jugará ahora en Miami, permitió a Landon Donovan
convertir cuatro goles por primera ocasión en su vida.
Para colmo de males, los cubanos quedaron con 10
hombres sobre la cancha, por tarjeta roja al defensor Reyxander
Fernández, tras juego brusco en las postrimerías del primer
tiempo, cuando la pizarra reflejaba 3-0.
Los seguidores del balompié en Cuba elogian el
resultado de su elenco, que llegó a esta Copa de Oro después de
estar invicto en cinco partidos de las eliminatorias caribeñas,
incluidos triunfo sobre Trinidad y Tobago, en casa de éste. Y que
además lograron su primera victoria en estas versiones (el 2-0
contra Canadá) y el pase inédito a los cuartos de final, tras
haber sido eliminados en la primera fase en las Copas de 1998 y
2002.
Pero los aficionados no ocultan su preocupación por
las goleadas de los dos últimos encuentros: el 3-0 de Costa Rica y
el 5-0 de EE.UU., y una marcada recaída del acondicionamiento
físico, que pudo ser la causa del pobre marcaje.
En la Copa de enero de 2002, en Pasadena, a pesar de
no haber avanzado en las eliminatorias, los de la Perla de las
Antillas igualaron a cero con Corea del Sur y perdieron 1-0 por un
penal, discutido, con EE.UU., ambas escuadras de gran actuación en
el Mundial de cuatro meses después.
Aunque la goleada fue seguida por la televisión, no
creará en nuestro caimán los dimes y diretes que suelen producir
los sucesos en el béisbol, que sigue sin ser amenazado como el
deporte nacional.
Alineación de Cuba, con provincias de origen:
Odelín Molina (Villa Clara); Silvio Pedro Miñoso (Villa Clara),
Yenier Márquez (Villa Clara), Alexander Cruzata (Holguín), Nayuri
Rivero (Matanzas), Reyxander Fernández (Ciego de Ávila); Jorge
Ramírez (Granma), Lázaro Darcourt (Pinar del Río), Pedro Faife
(Villa Clara), Léster Moré (Ciego de Ávila ), Maikel Galindo
(Villa Clara). Sustituciones: Alaín Cervantes (Ciego de Ávila) por
Rivero, a los 45; Liván Pérez (Camagüey) por Moré a los 45;
Lázaro Ruiz (Villa Clara) por Darcourt a los 67.
EE.UU: Keller; Hejduk, Califf, Gibbs, Vanney;
Ralston, Mastroeni (Mulrooney), Reyna (Stetwart), Lewis, Donovan y
Mac Bride (Mattis).
Goles: Donovan, minutos 23, 28, 55, 76, y Ralston,
42.