En la Isla de la Juventud
Oportunidades y fortalezas remontan distancias
Diego
Rodríguez Molina
NUEVA GERONA.—
Después de los fuertes embates de tres huracanes en menos de un
año, la economía pinera enrumba por el 2003 con nuevos aires,
fortalezas y oportunidades.
De su pronta
recuperación y capacidad para ascender no solo dan muestras los
crecimientos del 9,6% en la producción mercantil respecto al plan
en el primer semestre del año y del 10 en relación con la mitad
inicial del 2002, sino también un fuerte proceso inversionista
encaminado a resolver en el más breve plazo posible los daños y
concluir o impulsar obras asociadas a la Batalla de Ideas.
Aun cuando la
agricultura no ha logrado los resultados esperados, se incorporan a
la producción las áreas de plátano y de otras viandas.
En esta breve etapa es
elocuente el avance en la ampliación y reparación de otros
servicios de alto interés social como el gas, que ya llega a más
del 85% de las cocinas pineras, y comunicaciones y electricidad, las
cuales amplían sus servicios en las comunidades más apartadas.
Resulta prometedor que
los incrementos se registren en aspectos tan importantes como las
ventas de bienes y prestación de servicios, los cuales crecen en
más de un 14% respecto a la primera mitad del pasado año; y
sobresalgan en la Construcción (12%), la industria (20%),
Comunicaciones, e incluso en el sector agropecuario, dado el peso
que tiene en la vida local.
Pero si un indicador es
ilustrativo es el haber superado en 36% lo previsto en el valor de
los fondos exportables, y obtener los mejores resultados en la
historia del turismo en la región, el cual aportó el 57% de los
ingresos en divisas convertibles, al tiempo que muestra grandes
posibilidades para estimular otros sectores económicos.
El principal polo
turístico, Cayo Largo del Sur, a más de 170 kilómetros al
Suroeste de Ciudad de La Habana, continuó incrementando la
participación de los productos nacionales —que hoy cubren allí
el 66% de las necesidades—, y se revela como importante fuente de
empleo.
Además de reabrirse la
línea regular marítima de carga, que mucho puede contribuir a
abaratar costos, firman importantes contratos entidades
suministradoras, se propician encuentros, exposiciones y demás
actividades promocionales, y se emprenden diversas iniciativas.
Así, frente a las
adversidades actuales, esta Isla de la Juventud lucha por acortar
distancias, abaratar costos y aportar más y mejores producciones y
servicios que mucho agradece el pueblo. |