|   GUILLERMO CABRERA
            ÁLVAREZ Soy trabajadora del
            cardiocentro de Santa Clara con 19 años de trabajo, graduada de
            preuniversitario y técnico medio. En estos momentos trabajo en el
            departamento de Admisión. En el pasado mes de septiembre pasé el
            curso de Operadora de Microcomputadora en el Centro Provincial de
            Joven Club, con duración de cuatro meses. Se nos dio un
            certificado de Graduado de Operadora de Micro con tomo y folio
            firmado por el Director Provincial de los Joven Club, con el fin de
            optar por una plaza de operadora de Micro. En el primer momento
            se me dijo que no había problemas y en días posteriores se me
            comunicó que no eran válidos los cursos pasados en los Joven Club,
            tampoco los dados en la Universidad ni en la Academia de Ciencias de
            Cuba, ni en el Instituto de Ciencias Médicas. Que solo son válidos
            los cursos pasados en el CENSAI y que estos se cobran con un por
            ciento en divisa. ¡Cómo es posible!, si en estos momentos en
            nuestro país se lleva a cabo una colaboración entre el Ministerio
            de Salud Pública y los Joven Club, preparando personal como
            técnico en computación, como se vio por televisión en la
            provincia de Holguín. Esto es difícil de
            entender pues es de público conocimiento la fama y el prestigio que
            tienen los Joven Club, y los demás centros e instituciones de
            enseñanza. Esto tiene que tener una aclaración. (Dunia
            Bermúdez Pérez, Santa Clara, Villa Clara) RESPUESTA OFICIAL DEL
            MINISTERIO DE TRABAJO Y SEGURIDAD SOCIAL No se puede considerar
            que los trabajadores que han pasado cualquier curso de computación
            que no sea el que impartía el antiguo INSAC, cuyas funciones
            atiende hoy el CENSAI (la ENSI no existe), puedan tener los
            requisitos de conocimientos que exige el cargo de Operador de
            Microcomputadora. (Antonio Espiñeira, dirección de
            organización del MTSS) CONSIDERACIONES DE
            ABRECARTAS La vida avanza con mucha
            más rapidez que las disposiciones ministeriales, y la Instrucción
            No. 5165 en sí misma necesita actualizarse, pues solo da una
            opción para calificarse en un centro que ya se transformó. No cabe la menor duda de
            que el CENSAI es una de las entidades insignias en la enseñanza de
            la computación especializada, y cada día amplía su universo. Pero
            no es ya la única. A la memoria podría citar al MINBAS, que cuenta
            con el mejor centro de adiestramiento nacional. Los Joven Club
            irrumpieron en el escenario con una fuerza extraordinaria y ya
            tienen un aval admirable en la formación de especialistas, y
            existen muchos proyectos futuros. Los tiempos cambian, y
            la misma plaza de Operador de Micro —tan vital en los días
            iniciales, cuando una computadora era algo raro en una oficina—,
            la vida la va modificando. Ahora habitualmente se le pregunta al
            contador, a la secretaria, a cualquier especialista que va a ocupar
            una plaza, si domina la computación, como una destreza más dentro
            de su calificación. Estoy seguro que el
            curso que recibiera usted durante cuatro meses en el Joven Club, la
            capacitó para ocupar esa plaza. Por favor, luchemos porque las
            normas, las instrucciones, evolucionen con la vida, solo así
            evitaremos quedarnos atrás y privar a quienes se esfuerzan por
            avanzar. Escríbanos: Sección
            Abrecartas / Periódico Granma / CP 10699 Habana 6 |