MADRID, 14 de mayo (PL).— El
gobierno español ha prometido a las empresas locales el nueve por
ciento del negocio de la reconstrucción de Iraq, aseguran hoy aquí
fuentes del sector privado.
Ese porcentaje representará para las
compañías españolas unos 6 000 millones de euros (más de
6 800 millones de dólares), dentro de un total previsto de
casi 65 000 millones para el conjunto de obras que requiere el
devastado país árabe.
Según informa El Periódico, de
Cataluña, ya algunos empresarios han sido informados por el
comisionado del Gobierno para Iraq, Fernando Díez Moreno, que ese
será el porcentaje del pastel que corresponderá a España en la
reconstrucción y modernización de Iraq.
Esa misma cifra fue también
confirmada por el responsable de exportación de la firma Uralita,
José Luis Maté.
Las compañías que trabajarán en
Iraq como subcontratistas de las empresas estadounidenses, que por
supuesto se llevan la parte leonina, tienen la impresión de que
Washington busca más el aporte de servicios que de suministros,
advierte El Periódico.
Al respecto agrega que esa
perspectiva no agrada a muchos y que será "difícil"
movilizar a personal y funcionarios para trabajar en Iraq, país
donde aún no se ha alcanzado una estabilidad mínima tras la
invasión de Estados Unidos.
Por su parte, Juan Costa, secretario
de Estado de Comercio y Turismo, presentó ante el Fondo Monetario
Internacional un estudio gubernamental sobre las principales
necesidades que tiene Iraq y su costo económico.
Aunque el estudio no fue pedido por
ninguna institución internacional, que ya han hecho sus cálculos,
desde el departamento que dirige Costa, adscrito al Ministerio de
Economía, se considera que España "es el país que mejor
conoce Iraq", lo cual les motivó a hacer el mencionado
análisis.
El estudio señala que Iraq requiere
inversiones por 64 625 millones de euros durante la próxima
década para garantizar sus necesidades básicas y equipararse a los
países de su entorno.
Pero el Ministerio de Economía
considera que será necesario aportar la mitad de esa cifra en los
primeros dos años, y destinar casi 10 000 millones de euros
solo a crear un aparato de administración pública en Iraq.
Costa advirtió que la producción de
petróleo de Iraq no será suficiente para cubrir los gastos de
reconstrucción, por lo cual se creará un fondo internacional que
se decidirá en una conferencia de países donantes que se
efectuaría antes del verano.
Aunque con algunas diferencias en
cuanto a cifras, el informe español resulta bastante coincidente
con el realizado por las autoridades norteamericanas en cuanto a la
planificación de los gastos y la necesidad de aporte internacional.