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Promoviendo la histeria belicista MIGUEL ÁNGEL UNTORIA PEDROSO El gobierno norteamericano anunció que a partir del próximo lunes se realizará en el territorio continental de Estados Unidos, particularmente en las áreas de Seattle, Chicago y Washington, un ejercicio de seguridad, a nivel nacional, con funcionarios de alto nivel, en el que participarán más de 8 500 personas de más de 100 agencias federales, estaduales y locales, los sitios de noticias en Internet de la Cruz Roja Americana y el Gobierno de Canadá A un costo de 16 millones de dólares, el TOPOFF, (dirigentes de alto nivel) nombre codificado del entrenamiento, persigue el objetivo, según la información disponible, de "mejorar la capacidad de la nación para salvar vidas en caso de un ataque terrorista, que incluya el uso de armas de destrucción masiva". El ejercicio, en realidad, sembrará la histeria guerrerista una vez más, en esta ocasión simulando un ataque con sustancias radiactivas y biológicas, pues la publicidad desplegada en torno al TOPOFF actúa directamente, en primer lugar, sobre la población norteamericana a la que se mantiene desde hace meses en diferentes grados de alertas y escuchando anuncios de próximos ataques terroristas inevitables; y en segundo lugar a la opinión pública mundial, ante la cual se trata de justificar el empleo de la fuerza, incluso en el máximo grado de intensidad, para luchar contra el terrorismo en cualquier parte del mundo. La simulación de un ataque con una bomba radiológica (bomba sucia) en Seattle, Washington, cerca de una vieja cervecería y la diseminación de una plaga pneumológica en el medio del campo en Chicago, crearán una tensa situación de terror en Estados Unidos durante toda una semana de trabajo. Desde Canadá se reportarán efectos de contaminación en la población similares a los que se registrarán en Seattle. El primer ejercicio de este tipo se realizó en mayo del 2000 en Denver, Colorado, y en Portsmouth, New Hampshire. En Denver, el escenario simuló un ataque químico, y en New Hampshire un ataque biológico. El TOPOFF tendrá una duración de cinco días y según la propaganda, será una simulación de ataque terrorista, en el que el Departamento de Estado y la Agencia Federal de Administración de Emergencia (FEMA por sus siglas en inglés), desempeñarán un papel principal. Con el objetivo de que las imitaciones que se realizarán "no causen el pánico en la población", los eventos a realizar durante el ejercicio han recibido extensa publicidad local. No obstante, el mensaje subliminal estará presente, para mantener a los norteamericanos y al resto del mundo esperando la próxima guerra. |
