Habla madre de paciente venezolano

Tengo fe en Cuba y en sus médicos

María Elena Piedra

Este viernes tocó suelo cubano el vuelo número 59 del Convenio de Salud Cuba-Venezuela con otro grupo de hombres, mujeres y niños enfermos procedentes del hermano pueblo.

En la pista, ayudados por una especie de elevadores, bajaron a los más afectados; algunos, desde sus sillas de ruedas, alcanzaron a saludar a quienes los esperaban bajo un esplendido sol.

"Tengo mucha fe en Cuba y en sus médicos", expresó a Granma Cruz Pérez de la Colina, madre de Carlos, un joven de 25 años que lleva tres con crecimiento del fémur derecho que parece salírsele de la piel.

Los recién llegados traen un común denominador: el eterno agradecimiento a Chávez, a Fidel y al pueblo cubano. Entre los enfermos atendidos por este programa, más de mil han sido intervenciones quirúrgicas.

Sentado en las piernas de su mamá está el niño Ángel Eduardo. Es su segundo viaje. "Ahora está más fuertecito, antes no podía mover ni siquiera la espalda, creo que cuando termine acá me lo llevaré caminando". Solo las lágrimas de la madre hablan de su dolor, pero también de su confianza en el futuro.

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