Granma espera tranquilo
¿Quién releva hoy?
Sigfredo
Barros
Mientras
los Potros de Carlos Martí pastan reposadamente en sus establos,
Santiago de Cuba y Villa Clara —con los nervios en tensión y la
mirada puesta en el reloj—, cuentan las horas que les faltan para
salir a la grama del Augusto César Sandino en busca del segundo
boleto de semifinales que otorga la región oriental, hoy a partir
de las 9:00 p.m.
Se trata de un
enfrentamiento en el cual la ofensiva ha estado por las nubes... y
el pitcheo por el suelo. Los bateadores villaclareños se han dado
banquete con los tiradores indómitos, al extremo de promediar 338
(51 jits en 151 turnos). Nada nuevo, pues si el cuerpo de lanzadores
santiagueros promedió en general 5,44, los relevistas trabajaron
para casi seis carreras limpias, 5,90, con solo 10 juegos salvados.
Santiago Bejerano consiguió una
hazaña: dos jonrones vs. Vicyohandri.
Por tanto, Franger
Reinaldo —cuya única opción es colocar en el box hoy a Ormari
Romero y esperar que sus bateadores consigan proporcionarle una
holgada ventaja—, se las verá negras si el gigante de Seboruco
sale como el domingo, cuando fue presa de los tres zurdos que
presenta Villa Clara en su alineación. Sus relevistas son muy
deficientes y en el béisbol moderno eso es imperdonable.
A los serpentineros
naranjas la artillería indómita les ha bateado para un average muy
inferior, 269 (36 en 134). Vladimir Hernández los condenó a un
anémico 207. Pero Víctor Mesa ya no podrá volver a utilizar al
derecho de Sagua. El zurdo Zaidel Beltrán fracasó en dos salidas
y, por tanto, el abridor naranja de hoy permanece en el incógnito.
Si Santiago se suelta a batear —y hombres tiene para hacerlo—,
hará falta toda la garra de los titulares del grupo C para
contenerlos. Será un choque atractivo, de vida o muerte para ambos.
GRANMA, DE HAZAÑA EN
HAZAÑA
Las palmas en la región
oriental son, hasta el momento y sin lugar a duda, para la
selección que bien dirige el veteranísimo mentor Carlos Martí. Al
principio de la campaña el panorama era desolador: Marcos Naranjo,
su mejor bateador, suspendido; Ernesto Guevara, su segundo abridor,
lesionado; Leonardo Rojas y Yunior Sanz, designado y receptor
titular, respectivamente, ausentes por diferentes razones.
Ahora, con el boleto
semifinalista en las manos, puede hablarse de Granma en términos
encomiásticos. Encontraron a un bateador como Yordanis Samón —aspirante
de fuerza al título de Novato del Año—, un lanzador joven en la
figura de Yanier González (9-4-3,78) y un Ciro Silvino dispuesto a
demostrar que su exclusión de la preselección nacional el año
pasado fue una injusticia.
Ningún especialista
pudo adivinar la sensacional barrida en el Calixto García que les
proporcionó el pase y sacó a Holguín de la pelea. Y tampoco que
dispusieran de Camagüey en cuatro partidos, derrotando en dos
ocasiones a un estelar como Vicyohandri. Ahora, crecidos en la
batalla, los granmenses se convierten en un hueso duro de roer para
cualquiera de los dos equipos que salga airoso hoy en el Sandino.
¡Cuidado con los Potros! |