WASHINGTON, 7 de abril (PL). — Pese
al silencio del Senado sobre resoluciones contra países que se
oponen a la intervención de Estados Unidos en Iraq, legisladores
republicanos tratan hoy de sancionar a Francia, Alemania y Rusia.
Los representantes republicanos Mark
Kennedy, de Minnesota, y George Nethercutt, de Washington, buscan
prohibir que empresas de esos países accedan a los contratos, por
valor de 2 500 millones de dólares, para la reconstrucción de
Iraq.
El Senado aprobó un gasto de
emergencia de 77 700 millones de dólares sin pronunciarse
sobre la iniciativa promovida por la Cámara de Representantes de
sancionar a países que han rechazado la agresión
anglo-norteamericana.
La Cámara Baja aprobó la semana
pasada la propuesta, aunque de manera simbólica y ahora los
promotores insisten para que el Senado estudie el plan.
Al respecto, Kennedy expresó que es
importante enviar un mensaje junto con los dólares que apoyan la
invasión, en alusión a Moscú, París y Berlín.
Sin embargo, el senador republicano
John Engsign, de Nevada, retiró la pasada semana un proyecto
similar por recomendación de la Casa Blanca.
En solicitud de no apoyar
resoluciones de ese tipo el subsecretario de Estado, Richard
Armitage, dirigió una misiva al Congreso.
Con ese pedido, el ejecutivo intenta
distender las deterioradas relaciones entre Washington y esos
países, coinciden analistas.
Tras la oposición de Francia y
Alemania en el Consejo de Seguridad de la ONU y en la Organización
del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) el gobierno de Washington
llamó al boicot de productos importados de esos países.