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Mujeres en el jazz
¿Mejor? Muy posible
Pedro
de la Hoz
Son
más que nunca antes y van abriéndose paso con inteligencia y
carácter, pues musicalidad y conocimiento sobran. Vuelven a reunirse
entre el viernes y el domingo próximos en La Zorra y el Cuervo,
animadas por quien promovió por vez primera estos encuentros, la
tecladista y compositora Bellita Expósito. La divisa no es de corte
feminista, es decir, no estarán allí para que se les tenga en cuenta
por el sexo, sino por lo que realmente aportan a un mundo muy
competitivo, dominado desde su origen por la presencia del hombre. Mujeres
en el jazz se perfila más como realidad que desafío, con una
nómina en la que aparecen figuras establecidas como la saxofonista
Lucía Huergo y Canela, ese siempre sorprendente conjunto que alterna
el jazz con la música de baile, y noveles de la categoría de la
pujante vibrafonista Tamara Castañeda y el dúo Angelissa.
Bellita, líder de Jazz Tumbatá.
Para Bellita Expósito ha
llegado la hora de demostrar que entre las mujeres cubanas hay buenas
instrumentistas y que en la medida en que el fogueo crezca, ellas
crecerán todavía más.
"No
es un asunto que solamente tenga lugar en el ámbito cubano —aclara
la líder del cuarteto Bellita y Jazz Tumbatá—; en la misma cuna
del género lo habitual es señalar a la mujer en su condición de
vocalista. Todos conocen los grandes nombres del blues, Ella
Fitzgerald, Sara Vaughan, Carmen McRae. Pero con el tiempo han ido
apareciendo fenómenos como el de Regina Carter o la directora de
bandas María Schneider. En Brasil no se puede hablar del piano en el
jazz sin mencionar a Eliane Elías. Y entre nosotros es bien conocida
la flautista y saxofonista Jane Bunnet por su trabajo con músicos del
patio."
¿Y qué sucede en Cuba? "Algo
que sorprendió al principio, pero que en la medida que avance el
siglo se verá de manera muy natural. En nuestras escuelas de música,
donde existe una representación balanceada de sexos, los muchachos y
las muchachas practican todo tipo de géneros y estilos, y en los
últimos tiempos el jazz latino ha hecho furor. En algunas
especialidades, piano, flauta y percusión, casi siempre se deriva
hacia la improvisación jazzística. Entre las muchachas se está
tomando conciencia de que la jerarquía no te la da con quién tocas,
sino cómo lo haces. Eso me lleva a pensar en que las mujeres cubanas
en el jazz serán cada vez mejores".
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