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Disciplina y control, absolutas prioridades para el Turismo
Reafirma Carlos Lage que Cuba seguirá siendo un destino de paz, salud y seguridad para traer más visitantes
Félix
López
Podemos sentirnos
alentados por los resultados, pero no conformes. El sector más
importante de la economía del país, que es hoy el Turismo, tiene
que ser también —y no lo es— el de más disciplina, el de más
control y el de más exigencia. Todo aquí debe estar bien regulado,
y no hay razón para permitir que algo no se cumpla, señaló Carlos
Lage Dávila, secretario del Comité Ejecutivo del Consejo de
Ministros, en el balance anual de este organismo.
El proceso de recuperación del Turismo se ha mantenido en los inicios de este año.
En las conclusiones de
la reunión, realizada el viernes en el teatro del Ministerio de la
Informática y las Comunicaciones (MIC), Lage recordó que hace
apenas 10 años, Cuba no era un destino turístico. La URSS había
desaparecido, el bloqueo se recrudecía y pocos en el mundo pensaban
que la Revolución cubana podría resistir. Fue nuestro Comandante
en Jefe quien tomó la decisión, en esa circunstancia, de convertir
al Turismo no solo en un sector de la economía del país, sino en
el más importante para nuestro desarrollo.
Aquello, añadió,
parecía un imposible. Cada vez eran más frecuentes y extensos los
apagones, el transporte público más escaso y las dificultades
económicas de todo tipo, más graves y profundas. Ningún país se
propuso nunca desarrollar el Turismo en tan adversas condiciones.
Para ilustrar hasta
dónde hemos llegado, Lage compartió con los presentes el resultado
de una reciente encuesta de una firma española entre 2 850
especialistas de 23 países: Cuba ocupa el cuarto lugar como destino
turístico, la Ciudad de La Habana el quinto, Varadero el tercero
como playa, el Hotel Nacional el tercero como instalación, y Cuba
es la preferida entre todas las islas del mundo. Recibimos hoy ocho
veces más ingresos, cinco veces más turistas, con tres veces más
habitaciones y dos veces más trabajadores.
Advirtió Lage que las
más absolutas prioridades para mejorar los resultados del Turismo,
pueden resumirse en dos palabras: disciplina y control. Para
lograrlo, nada mejor que meditar y revisar nuestro trabajo a partir
del análisis realizado el viernes, al hacer las conclusiones de la
Asamblea Nacional, por nuestro Comandante en Jefe. No cometamos el
frecuente error de creer que cuando se hace una crítica es para
otro. La crítica es para todos.
SE REANIMA LA
INDUSTRIA DEL OCIO
En las estadísticas
difícilmente exista un año más adverso para el sector turístico
que el 2002. Los actos terroristas del 11 de septiembre del 2001
dejaron, además de la quiebra de importantes aerolíneas, una
disminución de los flujos turísticos al Caribe, que en el caso de
Cuba se sintieron a lo largo de 15 meses, con un decrecimiento (al
final del año) del 5%.
Afortunadamente, en los
meses finales del 2002 (octubre/diciembre) se produjo un proceso de
recuperación que se ha mantenido, vigorosamente, en los iniciales
del presente año. Solo en el pasado enero se recibieron 190 413
visitantes, noticia alentadora si se tiene en cuenta que para el
2003 está previsto el arribo de 1 900 000 turistas. El pasado año
esa cifra fue de 1 686 162 (11 168 998 turistas/día), y una
ocupación del 50%, 11 puntos menos de lo planificado.
En términos
económicos, la resaca de los atentados terroristas dejó al país
con 52,2 millones de dólares menos de ingresos (160 millones menos
que lo planificado), y un índice de costo de 80 centavos por cada
dólar ganado. Los aportes al Estado (223 millones de utilidades)
solo alcanzaron el 95% de lo previsto, y las entidades cumplidoras
fueron Islazul, Habaguanex, Campismo, Caracol y Cubanacán (Turismo
y Salud, Servisa, CMOM y Publicitaria Coral).
Como positiva se
calificó la tarea de elevar la moral revolucionaria de los cuadros
y trabajadores del MINTUR, considerado un objetivo principal a todos
los niveles, y vehículo para identificar las causas de los hechos
nocivos y deficiencias en los servicios que presta el Turismo. De
igual forma se valoraron las medidas de ahorro, el estímulo a los
ingresos extrahoteleros y el "plan de no gastos" instrumentado por
Cubanacán al inicio de la crisis y que ha quedado como paradigma en
la búsqueda de nuevas reservas.
Ahora, apuntó Ibrahim
Ferradaz, titular del MINTUR, tenemos la posibilidad de mantener en
12 meses lo que hicimos en el último cuatrimestre del 2002. La
primera medida, el mayor esfuerzo, transita por desarrollar un
turismo de paz, salud y seguridad, para traer más visitantes, y
ofrecer más opciones extrahoteleras con medidas de eficiencia que
nos permitan disminuir los costos y crecer en ingresos.
El balance, además de
otorgar, con carácter honorífico, el sello distintivo por 25 años
como cuadros en el Turismo a los Cinco Héroes cubanos encarcelados
injustamente en Estados Unidos, reconoció a la compañera María
Antonia Rodríguez, directora del Gran Hotel, de Camagüey,
seleccionada como cuadro destacado del Estado, así como a
dirigentes y entidades que sobresalieron por su trabajo en el 2002. |