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Balance anual del Transporte La eficiencia como reserva para enfrentar Félix López La idea de que en la eficiencia tenemos importantes reservas para enfrentar la reducción de recursos y limitaciones materiales —a partir de que la economía mundial se ha complicado en los últimos meses y el precio del petróleo alcanza los 36 dólares por barril—, fue señalada por Carlos Lage Dávila, secretario del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros, como el mensaje principal del balance anual del Ministerio del Transporte.
En la reunión, realizada la víspera en EXPOCUBA, Lage recordó que este año no vamos a disponer ni de más equipos ni de más combustible para mejorar la transportación de la población y de carga. En cambio, aseguró, podemos perfeccionar el control de los recursos. Todavía estamos lejos de saber qué kilometraje garantizó cada litro de combustible, lugar por lugar. Presionados por la situación material, debemos hacer el máximo esfuerzo por encontrar medidas administrativas que fortalezcan el control. Reconoció que el análisis realizado por los cuadros del MITRANS, lleva implícito el conocimiento de estos sobre la situación de la economía mundial; y advirtió que, aun en medio de esa circunstancia singular y difícil, el país se desarrolla en condiciones muy diferentes a la de años anteriores: al inicio del período especial no había turismo ni la producción actual de petróleo ni la organización y eficiencia de hoy, con todos los problemas que tenemos ni la posibilidad que tiene el sistema socialista para ordenar las medidas. Para ilustrar este último tópico, Lage recordó la reciente revitalización de los inspectores populares —vía por la que ya se mueven aproximadamente 30 000 personas diariamente, el equivalente a unos 100 viajes de ómnibus—; y al mismo tiempo llamó a organizar con eficiencia la transportación de carga por ferrocarril, y a evitar por todas las vías que los camiones viajen vacíos... ¿Hay reservas o no para ahorrar recursos? UNA PARADA EN LAS URGENCIAS Durante poco más de tres horas de análisis, los cuadros del MITRANS se detuvieron en los aspectos más importantes relacionados con el transporte en el país. Prioridad número uno dieron a la necesidad de avanzar en el proceso de perfeccionamiento empresarial. Sobre la calidad de los servicios que el MITRANS brinda a la población y a entidades del país, Álvaro Pérez, titular del organismo, llamó a todos los cuadros y trabajadores a impedir que las limitaciones materiales los sepulten en el conformismo, la mediocridad y la rutina. Sobre los accidentes del tránsito, conver-tidos en una de las principales causas de muerte en nuestro país, el Ministro llamó a la aplicación consciente de la Ley 60, modificada recientemente, y de otras medidas complementarias que tienen como objetivo revertir la tendencia negativa en el incremento de este flagelo que cada año cobra numerosas vidas humanas y causa graves daños a la economía. No menos importante, añadió Álvaro, es la lucha contra la ilegalidad y el delito, dedicando el mismo esfuerzo a la prevención y a la educación, al igual que a la vigilancia y al control. LO QUE LLEGÓ PARA QUEDARSE Un merecido análisis dedicó el balance del MITRANS al tema de los inspectores populares, revitalizados a finales del pasado año, como parte de las medidas para paliar las dificultades en el necesario movimiento de la población, y la limitada disponibilidad de medios de transporte público. Hasta el momento se han abierto en el país 1 045 puntos de embarque (96 dentro de la capital), mientras que la nómina de inspectores asciende a 1 928, de los cuales el 59% procede de los antiguos amarillos, y el 37% pasó el curso de preparación de 80 horas. Según las estadísticas de la Dirección Provincial de Transporte en la capital, entre 7 000 y 8 000 vehículos prestan sus servicios, mientras que unos 1 000 no se detienen en los puntos. Sobre la actitud irresponsable y poco solidaria de estos últimos, varias son las experiencias que se tienen en el país. En la provincia de Granma, por ejemplo, el Primer Secretario del Partido en el territorio preside una reunión a la que deben asistir los choferes que no paran y los jefes del organismo correspondiente. En la capital, el Gobierno, como primera medida, cursará cartas a las empresas para alertar de la indisciplina y pedirá información sobre las medidas tomadas. La vida demuestra que por esta vía se trasladarán varios millones más de personas en todo el país. |
