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Cruzada Teatral Complicidad con los montunos Haydée León y Pablo Osoria GUANTÁNAMO.— En complicidad con la gente de las montañas transcurrieron los días de la Cruzada Teatral por esa región, Premio Nacional de Cultura Comunitaria, que durante un sui géneris periplo realizó más de 200 presentaciones en más de 100 comunidades serranas del extremo oriente cubano. Dedicado este año a los aniversarios 150 del natalicio de José Martí y 45 de creado el II Frente Oriental Frank País, acompañaron al proyecto teatral guantanamero la destacada actriz Corina Mestre, varios críticos y especialistas de esa manifestación en el país, y como en ediciones anteriores, el grupo de teatro Andante, de la provincia de Granma, quienes compartieron durante poco más de un mes una experiencia que tiene el atractivo de los improvisados escenarios, el traslado de una comunidad a otra a lomo de mulos o en camiones de doble tracción y el profuso empleo de títeres. Por los lomeríos más escabrosos de seis de los diez municipios guantanameros, cada grupo participante mostró una representación abierta a diferentes espacios y núcleos poblacionales, como herencia de una práctica que se propuso desde los tiempos fundacionales, y lo logra, según sus protagonistas, abrir el debate a aspectos de la identidad cultural y estimular la cohesión social entre los serranos y las manifestaciones culturales. Otro saldo importante del andar de los "cruzados" por las lomas es la promoción del análisis y la risa reflexiva de niños y adultos, del movimiento de artistas aficionados en lomeríos, y el adiestramiento a pedagogos en la confección de títeres y otros medios, con recursos naturales. Diferentes instituciones de nuestro país han reconocido el impacto social de este proyecto. Tal es el caso del Centro Félix Varela, que otorgó al colectivo guantanamero el Premio Elena Gil, instituido en honor a esa relevante educadora. |
