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Fabrica de equipos médicos La diversificación retomó el camino Orlando Guevara Núñez
Inaugurada en 1988 la planta fue drásticamente dañada en esta última década al quedar sin materias primas, mercado, ni posibilidades de financiamiento. Así sufrió entre 1990 y 1996 pérdidas cuantiosas que llegaron en un año hasta los 13 millones de pesos. La disyuntiva era transformarse y buscar otros horizontes o sucumbir, con perjuicio para sus más de 400 trabajadores. La decisión fue sortear con inteligencia las adversidades, buscar alternativas y luchar por la recuperación y desarrollo, lo cual significaba un extraordinario reto para todos. Lo primero era cambiar su objeto social, es decir, la razón de su existencia. Así, además de producir y comercializar equipos e implementos médicos, se extendió a otros renglones como mobiliario hotelero y gastronómico, piezas metálicas para diversos usos, estantería metálica de almacenaje, carpintería de madera y aluminio y componentes de repuesto para entidades de la economía nacional. También se aplicó el servicio de posventa de los equipos producidos y comercializados. En medio de no pocas dificultades, a partir de 1997, comenzó a gestarse la recuperación. Desde entonces, el crecimiento anual ha sido de un 20% y este año se propone una producción mercantil que sobrepasa los siete millones de pesos. Hasta el momento, la fabricación y las ventas se sobrecumplen. Luego de la transformación, la producción de equipos e implementos médicos continúa, pero ahora representa solo el 23% del volumen productivo y de las ventas. La diversificación ha sido fructífera. Y algo muy importante: la entidad produce con calidad y competitividad, lo cual está confirmado por la obtención el pasado año de la norma ISO-9002. Aunque sin alcanzar aún los niveles potenciales, se cuenta ya entre las exportadoras de la provincia y contribuye a la sustitución de importaciones, principalmente en la reparación de sillones de estomatología y mesas quirúrgicas, lo cual ahorra al país miles de dólares. Sus 423 trabajadores están incorporados al proceso de perfeccionamiento empresarial y realizan inversiones y mejoras tecnológicas que ayudarán a incrementar la producción. Cumplieron satisfactoriamente la misión de asegurar los muebles para la Escuela Formadora de Trabajadores Sociales Frank País, de Santiago de Cuba, cuyo cumplimiento fue en tiempo récord y con calidad. Ello les valió hacerse acreedores a la bandera de Proeza Laboral. Muchos de los artículos producidos por esta industria santiaguera amplían su mercado dentro del país y pueden incrementar las exportaciones. La recuperación es un hecho: RETOMED transita por el camino del desarrollo. |
SANTIAGO
DE CUBA.— La fabrica RETOMED, surgida para la producción de
equipos médicos, es un aleccionador ejemplo de recuperación y
desarrollo de una empresa estatal socialista, que ha sabido
enfrentar la compleja situación económica del país.
