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18/03/2002
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Mantener y preservar lo que se tiene

Los hidráulicos ajustan sus cuentas

Juan Varela Pérez

Los hidráulicos cubanos, con otro año de buen trabajo, afirmaron en su balance anual estar en disposición de enfrentar las limitaciones materiales y no detenerse. Como gente inconforme optaron por no hablar mucho de los avances que reflejan los resultados del 2001.

Prefirieron discutir, en familia —y ese fue el espíritu del informe—, las vías y formas para mejorar, digamos, algo muy sensible y de interés colectivo: los servicios de acueducto y alcantarillado.

Foto: FERNANDO LEZCANOPreferencia absoluta
a la eliminación de salideros.

Cierto, plantea el documento sometido al análisis, que lo invertido rebasó los 111 millones de pesos, programa que incluyó la entrega del sistema de abasto de agua al municipio de Pilón, el acueducto de Zulueta y la terminación de 47,6 kilómetros de redes en Ciudad de La Habana, pero el propósito es crear las condiciones para que en el actual año no menos del 96% del agua que se suministra reciba el tratamiento adecuado.

No pocas intervenciones giraron en torno a un tema controvertido: la limpieza de las fosas. Se trabajará porque el ciclo no demore más de 10 días a partir de la solicitud que se haga .

El ingeniero Jorge Luis Aspiolea, presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, dijo que este es un problema complejo, el cual debe enfrentarse integralmente mediante un estudio profundo y amplio que incluya la revisión de las fosas existentes —se estima que en el país hay unas 
800 000— gran parte de ellas construidas sin ningún tipo de normas ni requerimientos técnicos. Mientras esto suceda, dijo, hay que utilizar de forma óptima los limitados recursos disponibles

Al referirse a un dato que aparece en el informe manifestó que estamos muy lejos de pensar que por haberse limpiado el pasado año 238 798 fosas, un 16 % más que en el 2000, las necesidades están resueltas.

Declarar eficientes el 30% de las 56 plantas potabilizadoras y "metrar" —como fuente de ahorro del agua— el 90% de los grandes consumidores estatales (gastan más de 30 m3 por día) son objetivos de trabajo muy definidos para el 2002 por el Instituto.

El 31 de diciembre último existían 2 726 localidades y poblados con acueducto, cifra que significa un incremento de 209 instalaciones sobre el 2000. Mediante los sistemas que operan las Direcciones Provinciales de Acueducto y Alcantarillados, fueron suministrados en el año 1 704,7 hectómetros cúbicos (hm3) de agua por vía de entidades que brindan, de conjunto, servicio domiciliario a más de 8,4 millones de cubanas y cubanos.

El volumen de agua reportado como consumida durante el 2001 para la vida económica y social fue de 5 380,1 hm3, o sea, el 83% del año anterior. De ese total, el 69% corresponde a las aguas superficiales y el 31 a las cuencas subterráneas. La situación favorable al terminar el año —había embalsados 
7 263,11 hm
3 aseguran las demandas de agua para la producción y los servicios.

Los debates concedieron prioridad, por su carácter estratégico, a la producción hidroenergética que llegó a 18,7 millones de kwh, de los 21 que estaban planificados. Déficit de agua en algunos embalses y roturas de equipos originaron el incumplimiento.

La dirección hidráulica dará preferencia a la ejecución de las pequeñas centrales hidroeléctricas que se montan en Zaza (Sancti Spirítus), Moa (Holguín), Corojo y Bueycito (Granma) y Protesta de Baraguá (Santiago de Cuba), para adelantarlas hasta el 70%, y a la presa Naranjo, en Holguín.

En un año caracterizado en lo interno por profundos cambios y transformaciones estructurales, el organismo incrementó en un 9% sus resultados económicos, desplegó un intenso trabajo para situarse en la vanguardia por el número de entidades, en el Perfeccionamiento Empresarial y el desarrollo del movimiento de obras excelentes como forma de preservar la infraestructura hidráulica actual y el avance en el rescate, mantenimiento y modernización de las redes de monitoreo del ciclo hidrológico.

Como afirmara Alfredo Jordán Morales, ministro de la Agricultura y miembro del Buró Político, al resumir este balance, la labor desplegada por los trabajadores hidráulicos en el 2001 sienta pautas para enfrentar, en situación ventajosa, las complejas circunstancias económicas del actual año.

Expresó que la situación financiera limitará el capítulo de las inversiones, pero los planes de las empresas, aclaró, tienen el respaldo para operar y mantener la infraestructura porque los recursos disponibles se dedicarán, en lo fundamental, a garantizar ese programa.

18/03/2002

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