La ceremonia se desarrollará con la presencia del presidente de la República, Hugo Chávez, y constituirá la primera entrega masiva de esos documentos en zonas rurales del país.

Ella será la antesala a la próxima promulgación de la Ley de Tierras, anunciada por Chávez, a la cual se dan los últimos toques por el Consejo de Ministros, y que tiene como objetivo la liquidación del latifundio en el país.

El anuncio de la entrega de los títulos provocó la protesta de la Asociación de Ganaderos de la zona que, sin embargo, debió reconocer la ilegalidad de la posesión de grandes extensiones de terreno por muchos de sus afiliados.

Los ganaderos mantienen en su poder propiedades rurales que, en realidad, pertenecen al Estado, y contaron con el apoyo de anteriores gobiernos para retenerlas sin legalización alguna de esa situación.

El presidente Chávez ha señalado en sus últimas intervenciones públicas que la Ley de Tierras permitirá a cualquier campesino denunciar los terrenos ociosos o ilegalmente ocupados, dando lugar a su intervención tras la correspondiente investigación.