SAN JOSE, 23 de agosto (PL).—Decenas de
campesinos costarricenses, desalojados desde julio pasado de una finca en
el norte de este país, cumplieron hoy cuatro días apostados frente al
Ministerio de Agricultura en demanda de tierras para su subsistencia.
Los cultivadores caminaron desde la
localidad de Río Frío, en la norteña provincia de Heredia, para que el
gobierno escuche sus demandas.
El secretario de la Asociación de
Campesinos de Sarapique, Marcos Gutiérrez, declaró a la prensa que el
grupo está integrado por unos 200 campesinos con sus mujeres e hijos.
"Queremos que el gobierno nos escuche
y se den cuenta de la situación en que vivimos", dijo Gutiérrez,
quien aclaró que no se irán hasta ser recibidos por el ministro, Alfredo
Robert.
Después de reunirse con el viceministro
del ramo, Constantino González, los trabajadores del campo aceptaron
participar en otra reunión junto al titular del sector y otros
funcionarios.
Los campesinos reclaman tierras para
sembrar arroz, frijoles y algunos tubérculos ya que en julio pasado unas
500 personas fueron desalojadas violentamente de sus parcelas, con saldo
de un muerto, de la finca conocida como El Bambuzal, que
presuntamente es propiedad de la transnacional Standar Fruit Company.
En el desalojo cinco policías también
resultaron heridos y ocho campesinos detenidos