 Almeida en Veracruz Rinden homenaje a José Martí y Agustín Lara VERACRUZ, México, 22 de agosto.—El Comandante de la Revolución Juan Almeida encabezó hoy en este puerto del este mexicano un homenaje al Héroe Nacional de Cuba José Martí y al músico veracruzano Agustín Lara, quien estuvo muy vinculado a la Isla, reportó PL.
Acompañado del embajador cubano en México, Jorge Bolaños, y de altos funcionarios gubernamentales del estado de Veracruz, Almeida colocó ofrendas florales en las estatuas de Martí y Lara, ubicadas ambas en la avenida José Martí, del malecón veracruzano.
En presencia de alumnos de una escuela que lleva el nombre del Apóstol cubano, Bolaños se refirió a los lazos de amistad que unen a Cuba y a México desde el siglo XIX, cuando Martí decidió escoger a esta tierra como refugio seguro.
Entretanto, el Comandante Almeida destacó la importancia y trascendencia que ha tenido para América Latina la música de Agustín Lara, conocido como el Flaco de Oro, muy popular en Cuba e hijo ilustre del municipio de Tlacotlalpa, de Veracruz.
Almeida, quien además de dirigente de la Revolución cubana es músico por vocación y de corazón, pidió un minuto de silencio en homenaje a Lara, cuya estatua en Veracruz es idéntica a la donada a Cuba recientemente por el gobierno de este estado.
Mañana viernes Almeida develará muy cerca de ese lugar un monumento a escala natural del fallecido cantante cubano Benny Moré, a quien está dedicado el VI Festival Internacional del Son Montuno, a inaugurarse hoy jueves en ese puerto, bañado por las aguas del Golfo de México.
La estatua de Moré, quien vivió en México ente 1940 y 1950, fue donada por
el pueblo de Cuba al de Veracruz, donde su voz ha hecho bailar a varias generaciones al son de estribillos como Santa Isabel de las Lajas querida y Pero, qué bonito y sabroso bailan el mambo las mexicanas, entre otros.
Almeida, en quien se complementan la condición de militar, político y guerrillero y su proyección artística, cultivada sobre la base de un profundo autodidactismo, expresó hoy su satisfacción por rendir homenaje a Martí, Lara y Moré en la tierra desde donde partió el yate Granma en 1956.
De hecho, su canción La Lupe, escrita poco antes de abandonar México rumbo a Cuba en ese entonces, ha llegado a ser considerada una especie de himno de los expedicionarios del Granma, que salió de Tuxpan para llevarlos hasta Playa Las Coloradas, en el oriente cubano.
A lo largo de sus 74 años de vida el Comandante de la Revolución, que fue expedicionario del Granma y participó en el asalto al Cuartel Moncada, ha alternado su actividad política con la creación artística.
Trabajó estrechamente con el fallecido director y orquestador Rafael Somavilla y la intérprete por excelencia de sus canciones fue la fallecida Amelita Frades, aunque también Beatriz Márquez y Farah María le concedieron amplios espacios en sus repertorios.
Su canción Dame un traguito ahora cantinerito se ha convertido en un clásico, desde que la popularizara el conjunto Sierra Maestra
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