La primera planta procesadora de soya en
Cuba, localizada en la ciudad, de Santiago de Cuba en el extremo
suroriental del país comenzó a producir aceite crudo y harina de consumo
animal, como parte de una amplia gama de alimentos derivados de ese rubro,
informaron hoy fuentes del sector.
Según Pedro Alvarez Medina, vicepresidente
de la Empresa Mixta Procesadora de Soya S.A., la nueva instalación se
levantó a un costo de 22 millones de dólares.
Ubicada en la zona portuaria de esta urbe
(880 kilómetros al este de la capital), la fábrica procesadora de soya
producirá anualmente 50 millones de dólares en aceite crudo y harina de
soya para el consumo animal, destinado a la sustitución de importaciones.
También elaborará a partir del próximo
mes de septiembre proteína texturizada y harina para el consumo humano,
en un 60 por ciento destinada a la exportación, fundamentalmente hacia el
área del Caribe.
Esta novedosa fábrica producirá también
lecitina de soya, que es un emulsificante para la industria médico-farmacéutica
del país y la elaboración de confituras en la industria nacional.
Aseveró Medina que la industria dará
respuesta a todo el consumo de aceite comestible que demanda actualmente
el sector turístico de la Isla.
Explotada por una fuerza mayoritariamente
joven (apenas alcanzan los 35 años de edad promedio), el 90 por ciento de
sus trabajadores son graduados universitarios.
Aunque el gigante de acero y hormigón
impresiona a quienes viajan hacia la zona oeste de esta ciudad, la fuerza
calificada para tan elevada producción se restringe solamente a 74
personas.
Equipada con tecnología de punta y
totalmente automatizada, la moderna fábrica podría en breve tiempo
convertirse en un símbolo de la eficiencia industrial y humana.
La instalación está conformada por 40
áreas principales, con tres edificios para la producción de la soya y
otros dos destinados a almacenar granos y harina. (PL)