pixelb.gif (34 bytes)

pixelb.gif (34 bytes)

pixelb.gif (34 bytes)

pixelb.gif (34 bytes)

Lecuona entre catalanes y cubanos

Sahily Tabares

Basta nombrar a Ernesto Lecuona (1895-1963) para hacer referencia a un símbolo de cubanía universal. Al ser recordado en la Sociedad de Beneficencia de Naturales de Cataluña, con motivo de su nacimiento el 6 de agosto, afloró su ángel múltiple, generador de aspectos de nuestra idiosincrasia sonora.

JORGE VALIENTE    

Diferentes timbres y sonoridades se unieron para homenajear al maestro Ernesto Lecuona en la Sociedad de Beneficencia de Naturales de Cataluña.

El programa del concierto reveló al Lecuona intérprete de una tradición que comienza con las contradanzas de Ignacio Cervantes y culmina con Ruiz Espadero, figura influyente en la gran escuela del virtuosismo español del siglo XIX. Y dejó testimonio de su léxico rítmico, que se nutre del teatro vernáculo, el danzón y de una consciente voluntad de integrar el bembé, la música guajira y la canción trovadoresca en una intensa amalgama de ritmos nacionales.

Una amplia conjunción de sonoridades y timbres reveló la paleta de colores del universo sonoro de Lecuona. La soprano Leila Benson, acompañada por la pianista Carmelina Muñoz, alcanzó maestría al recrear Bajo las palmeras y Canto indio. Y junto al declamador Luis Eduardo Cura Burguet desbordó sentimiento y temperamento en El jardinero y la flor. El barítono Alejandro David, y las sopranos Elina Calvo y Olga Díaz regalaron buen gusto y fantasía interpretativa con Vuelvo a ti, María la O y Balada de amor, texto de Juana de Ibarbourou. El joven pianista José Cabrera Montes de Oca, estudiante del Conservatorio Amadeo Roldán demostró el brillo irrepetible de La Comparsa.

Este espectáculo forma parte de la proyección artística de la Sociedad de Beneficencia de Naturales de Cataluña (Consulado 68), donde se ofrecen conciertos para sus asociados e invitados los primeros sábados de cada mes, a las 4: 00 p.m. El de septiembre estará dedicado al maestro Gonzalo Roig.

Desde su reapertura hace dos años, la Sociedad de Beneficencia de Naturales de Cataluña, fundada en 1840, mantiene espacios culturales que permiten un mejor conocimiento de tradiciones, costumbres, bailes y festividades autóctonas y el constante acercamiento a la literatura y al arte cubano contemporáneo. Por esta vía, los más jóvenes descendientes de catalanes afianzan sus raíces y enriquecen su bagaje cultural y estético.

Subirtop.gif (129 bytes)