 Acontecer
científico-técnico La fuerza del puño en el talento creador Util alternativa local premiada a nivel nacional, que permitió rescatar el moribundo boxeo en un lugar como Puerto Padre, tras ocho años de inercia Texto y foto: PASTOR BATISTA VALDES PUERTO PADRE.—Regino Chapman Mullint (uno de los portopadrenses más sanos, amigables y consagrados que conozco) es y seguirá siendo admirado con orgullo por los habitantes de la llamada Villa Azul de Cuba...
Regino ha demostrado que, además de guantes, se pueden fabricar sacos colgantes, guantillas, guanteretas, zapatillas y otros medios.
"En primer lugar porque fue subcampeón nacional en los años 70, cuando tuvo que enfrentarse a hombres como Alejandro Montoya", me comentaba hace poco en la localidad un anciano llamado Domingo.
"Pero sobre todo porque gracias a él se volvió a entrenar boxeo aquí en Puerto Padre", opina Armando, un joven de apenas 20 años de edad.
Y en efecto, según afirma el propio Regino, en 1996 hacía ya ocho años que ese norteño municipio (tierra del tricampeón olímpico y mundial Teófilo Stevenson) llevaba clavada la espina de ser
"el único del país donde no se practicaba el deporte de los puños", mientras las arañas realizaban tranquilamente su textil labor sobre los cuadriláteros.
"En el torneo Playa Girón celebrado en Santiago
—recuerda Chapman— comprobé que la falta de guantes y de otros medios era un problema general. Sin ellos es imposible cumplir las exigencias prácticas de la escuela de combate. Por eso se me metió entre ceja y ceja fabricar aquí mismo todo lo necesario."
Y atacando bien con el "gancho de la pasión", les fue encima a los talabarteros de la ciudad. Primero a David Puig Peña, luego a Hermes Nogales Carralero... Poco a poco los guantes iban quedando mejor...
"Nos dimos cuenta de que harían falta máquinas; Regino ha demostrado que, además de guantes, se pueden fabricar sacos colgantes, guantillas, guanteretas, zapatillas y otros medios
—prosigue Regino, actual Comisionado municipal de boxeo—. El Gobierno en la provincia nos ayudó a adquirir tres, dos de las cuales ya están aquí y la otra en Las Tunas.
"Y ya ves: menos el protector de boca, podemos fabricar todo lo demás. Hoy por hoy los cuatro combinados deportivos de Puerto Padre están surtidos con lo fundamental. Hace poco mandé dos pares de guantes para la EIDE provincial y un par de guanteretas para la ESPA..."
Pero según tengo entendido —le comento— con el pequeño grupo de trabajadores que has venido preparando también se pueden hacer otros implementos deportivos...
"¡Cómo no! Balones de fútbol, de voleibol, zapatillas de gimnasia, zapatos de cuero para los atletas de remo, guantes de béisbol, etc. Por ahora la gente trabaja en sus propias casas; tratamos de crear condiciones detrás del mismo gimnasio para curar el cuero y localizar un lugar donde instalar las máquinas.
"Los compañeros de la industria deportiva se quedaron asombrados con la calidad de una muestra que les llevé. Es más: puedo decirte que no hemos tenido cortaduras en la cara de un atleta boxeando con esos guantes, porque utilizamos cuero suave, bien procesado, de ganado vacuno joven o de chivos y ovejos.
Ello, más un poco de hilo, recortes de tela, guata o esponja para el relleno, algo de pegamento y manos dispuestas a crear, fija en apenas 26 pesos con 32 centavos el costo de un par de guantes para cuya adquisición el país tiene que desembolsar
—según consta en una ponencia presentada por Chapman— alrededor de 36 dólares.
Aunque lo más importante —reitera— es la capacidad de respuesta que localmente se puede dar para que niños y jóvenes puedan seguir entrenando.
Por eso cuando en el último Forum de Ciencia y Técnica, Regino recibió la noticia de que su experiencia en la Fabricación de Guantes de Boxeo Modelo Stevenson había resultado Destacada a nivel nacional y que era
—además— el primer trabajo que en la esfera del deporte alcanzaba esa categoría, sintió una mezcla de estremecimiento y de alivio en todo el cuerpo.
Pensó entonces en los 276 portopadrenses que en las categorías escolar, juvenil y social practican de nuevo el deporte de los puños, recordó a activistas como Eduardo Nogales, Alfredo Acosta, Antonio Batista, Rodnier Tejeda, Angel Portela, y sintió que había empezado a cumplirse lo que un día le aseguró a José Barrientos, Comisionado Nacional:
"En Puerto Padre el boxeo va a salir de la tumba, pasará a la terapia intensiva, de ahí a la intermedia, luego a la sala y va a terminar de alta un día, para que siga sano y salvo en cada barrio."
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