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Cuando todos esperaban el pase a semifinal
El partido contra Italia dolió ALFONSO
NACIANCENO
Enviado especial KATOWICE, Polonia.—Si al vencer el análisis pudiera diluirse un tanto en la euforia, la derrota solo deja espacio a la introspección, para discernir dónde radican los puntos débiles y en qué dirección dirigir los pasos.
Cada vez que los deportistas cubanos participan en fuertes competencias internacionales, sus actuaciones calan muy hondo en el corazón del pueblo. Y aunque se hallara a miles de kilómetros de la Isla, la delegación que desde hace un mes salió de La Habana para recorrer salas de Japón, Portugal, Yugoslavia y Polonia, ha sentido día a día el cálido apoyo de ese pueblo nuestro, noble y apasionado. Los voleibolistas, entregados al fragor de la Liga Mundial, conocían cuán pendientes de sus presentaciones quedaban más de 11 millones de compatriotas.
Los dos reveses ante Yugoslavia, en Novi Sad y Belgrado, a manos de los campeones olímpicos, no impidieron que los antillanos avanzaran al play off en esta ciudad. Si desde el inicio de la gira la afición del patio siguió por radio el desempeño de su equipo, la posibilidad de verlo por televisión dominar a potentes escuadras como Holanda y Rusia, incrementó el entusiasmo y el interés por no perderse ni un minuto de esta fase del certamen.
Ganarles a dos adversarios de talla mundial alimentó en el pueblo la esperanza de que, al romperse el hechizo de los reveses frente a Rusia, podría ocurrir lo mismo de cara a los ocho veces titulares de la Liga Mundial. La realidad ratificó las cualidades de un oponente que ha figurado entre los favoritos a la medalla de oro en los tres últimos Juegos Olímpicos.
Los italianos también han pasado por momentos difíciles, porque nunca esa presea dorada ha engrosado su lista de méritos.
Ante la inesperada eliminación del cuadro cubano para la semifinal de la Liga, ¿qué hacer? Lo único que se nos está negado es perdernos en un mar de lamentaciones, decisivo resultará ahora analizar los errores y continuar el intenso trabajo impulsado durante más de cuatro meses, en jornadas de mañana y tarde, sábados y domingos, por este grupo de muchachos, varios de ellos enfrentados por primera vez a una liza de altísima exigencia.
La columna vertebral del sexteto: el atacador cruzado, el líbero y el pasador debutaron en sus respectivas posiciones, en un partido internacional, cuando salieron al terreno en Hiroshima, Japón. Leonel Marshall (21 años), Ihosvany Chambert (28) y Alain Roca (24).
El segundo de ellos, proveniente del voli de playa, tiene que pulir aspectos importantes heredados de una práctica sobre la arena que difiere, en técnica y fundamentos, del voli de sala. Los hábitos motores no se cambian de un día para otro, y Chambert, en ocasiones, no recibe el balón con los antebrazos, lo cual aumenta el riesgo de entregar la bola al levantador con menos calidad, especialmente si el rival ejecuta un servicio fuerte. Sin embargo, en los partidos del play off tomó empeño y mejoró ostensiblemente su labor, al punto de colocarse primero entre los defensas del evento en esa fase.
Roca, aunque posee la madurez que conceden los años sobre el tablado, por necesidad del plantel, dejó su papel como atacador y le toma el pulso a la plaza más complicada, porque sobre el armador, como único hombre de frente al resto del colectivo, recae la responsabilidad de guiar el juego. Estrellas a la manera del italiano Paolo Tofoli, el brasileño Mauricio Lima, el holandés Peter Blangé, el ruso Konstantin Ushakov, el veterano Raúl Diago y la revelación de esta Liga, el bambino Valerio Vermiglio, no llegaron a la cumbre de un día para otro, sería bueno saber cuántos partidos internacionales archivan en sus exitosas carreras y verán que pasan de 200. Quizá me quedé corto.
Respecto al novel Leonel Marshall, su puesto de cruzado con el levantador le reclama una actuación para marcar alrededor de 20 puntos por desafío. No hubo nervios, el muchacho exhibió clase, para su corta edad y vestir la camiseta que llevara meses atrás Osvaldo Hernández, lo hizo bien en su debut.
Este deporte ha evolucionado bastante en un corto lapso. La introducción del tie break, el rally point, el líbero y otras variaciones aplicadas a las reglas, en aras de presentarlo más atractivo para las televisoras del mundo, exigen de los jugadores una preparación óptima, porque compite todo el año, un evento tras otro, y mantener la forma deportiva en un alto nivel entraña un reto para los colectivos de dirección.
No pretendo justificar al elenco de Cuba por no pasar a la semifinal. Considero que a la par de las imprecisiones vistas en el encuentro con Italia, le faltó combatividad; la victoria del día anterior sobre Rusia debió constituir un motor impulsor para salir al rectángulo más agresivo. Intento solo sugerir algunos temas a la meditación, porque, como a mis compatriotas, la derrota dolió.
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