Películas para ver en casa

Dora Pérez Sáez

En la década que recién finalizó, por razones harto conocidas, una nueva forma de entretenimiento se afianzó en el gusto de no pocos cubanos. El video, que aunque para muchos es aún un lujo, para otros se ha convertido en una distracción ideal, momento en el que la familia se reúne cómodamente frente al televisor, a la hora deseada y viendo el filme escogido.

Junto a este fenómeno se incrementó otro: el aumento de los llamados bancos particulares de películas, surtidos casi en su totalidad con cintas sin ningún valor artístico y copias de la peor calidad.

El Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), nada ajeno a esta situación, ha creado una red de videotecas estatales en todo el país, que brindan una oferta diferente, atractiva y variada, sin restricción en cuanto a género o país, y con reproducciones de indiscutible calidad.

Lo anterior fue dado a conocer por Benigno Iglesias, vicepresidente de ese organismo, quien anunció que, a excepción de Villa Clara y Ciego de Avila, ya existen treinta videotecas en todas las cabeceras de provincias del país, las que cuentan en su haber con cien títulos y varias copias de cada uno.

En los próximos meses se abrirán treinta establecimientos más, con opciones para todas las edades y gustos: clásicos como El Ciudadano Kane, películas cubanas y de artes marciales, son varias de las sugerencias que no excluyen la posibilidad de introducir en un futuro documentales, programas seriados y dibujos animados.

Con el desarrollo de esta modalidad, nuevas secciones irán apareciendo. Películas premiadas en Festivales Internacionales, serán algunas de las ofertas que por dos pesos, (rebajado este precio el fin de semana si se alquila más de una cinta), podrán adquirirse.

No se trata solo de lograr un competidor que quite fuerza a los particulares, sino de brindar una propuesta decorosa, donde la calidad de los filmes a ver haga del video un equipo, amén de cómodo y ventajoso, útil y valioso si de entretenimiento se trata.