Secretariado Nacional de la CTC

Establecen prioridades de trabajo después del Congreso

Silvia Martínez

El trabajo por el cumplimiento de las 22 resoluciones del XVIII Congreso de la CTC y los acuerdos derivados de su discusión, la política de cuadros a largo alcance del movimiento sindical y las acciones para una mayor compresión de las malévolas intenciones del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) se inscriben entre las principales tareas del movimiento sindical para el presente mandato el cual deberá realizarse con un trabajo superior y de mayor integralidad y a partir de un vínculo más directo con la base.

Luego de la distribución de tareas en las esferas profesionales de la CTC y de la realización de un análisis profundo de cómo encaminar la dirección por objetivos en todas las instancias de la CTC y sus sindicatos, el nuevo Secretariado Nacional recién electo examinó la conveniencia de hacer llegar a todas las secciones sindicales un tabloide contentivo de las 22 resoluciones aprobadas por el Congreso, la alocución de Fidel en el acto por el Primero de Mayo y la declaración política del cónclave, también dada a conocer por Pedro Ross en esa misma oportunidad.

Todos esos documentos, de gran valor para el trabajo sindical, serán acompañados con la publicación oportuna de los acuerdos del evento, bien en las comisiones de trabajo, en las sesiones plenarias, como en los encuentros de los delegados con sus sindicatos y organismos correspondientes y en los talleres por temáticas desarrollados a propósito del Congreso.

En tal sentido, Pedro Ross, secretario general de la CTC, realiza encuentros con todos los cuadros provinciales de la organización y de los sindicatos en todos los territorios con el objetivo de recoger impresiones sobre el Congreso, evaluar cómo los delegados informan a sus colectivos de los resultados y de los acuerdos allí adoptados. También en estos encuentros, realizados ya en Guantánamo y La Habana, se examinan las vías y métodos para encaminar el trabajo.

El Secretariado Nacional ponderó el alcance de la magna cita de los trabajadores y destacó que la etapa actual de trabajo es mucho más ardua para hacer valer todo lo allí examinado y preservar el principio de unidad que siempre ha caracterizado al movimiento obrero.