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 Semifinales a partir del viernes ¡Faustino ganó el bueno! Sigfredo Barros Faustino Corrales silenció no solo a los Industriales, sino también a todos los que afirmaban que no sabía ganar un juego decisivo, y con una soberbia actuación colocó a Pinar del Río en las semifinales de la XL Serie Nacional de Béisbol, respaldado por todo su equipo y muy en especial del novato Juan Miguel Miranda, autor de dos batazos claves en los inicios del choque.
Faustino resultó un enigma para los azules. Ni la presión que normalmente se siente en un estadio repleto de un extremo a otro —como lo estuvo el Capitán San Luis—, ni el hecho de enfrentarse a un conjunto que venía de menos a más, inspirado después de conseguir el empate a dos victorias, hicieron mella en el zurdo de Mantua, quien a los 35 años sigue siendo el mejor lanzador de esa mano en nuestro béisbol.
El novel Juan Miguel Miranda demostró temple de veterano. Entrada tras entrada, Faustino (tercero en promedio de limpias, 2,58; segundo en average de los contrarios frente a él, 197, y tercero en ponches, 174) colgó un cero detrás de otro, apoyado más en su recta cercana a las 90 millas que en su gran curva, la cual a veces no le rompía en zona de strike, lo cual provocó que colocara en conteo de tres bolas a más de un bateador y acumulara 108 envíos al finalizar la sexta entrada. En total propinó 10 ponches, regaló un boleto, permitió cinco sencillos y propinó un pelotazo en 8 entradas. En el noveno, el mentor Jorge Fuentes lo reemplazó por Pedro Luis Lazo —ya Faustino había permitido tres indiscutibles en las entradas siete y ocho—, a quien Antonio Scull saludó irrespetuosamente con jonrón, para evitar la blanqueada. Guillermo Carmona le entregó la pelota a su caballo de batalla, el derecho Lázaro de la Torre, un lanzador al cual Industriales le debe el haber podido llegar al quinto juego, luego de ganar los dos partidos de viernes y domingo. Pero el descomunal esfuerzo realizado por el tercer ganador de juegos en la pelota cubana —en ambas salidas había realizado un total de 223 lanzamientos—, le restó efectividad y ya en el capítulo inicial Miranda le sacó la Mizuno 150 por el jardín izquierdo, una conexión que pegó en el muro y se fue hacia atrás. Y ya en el segundo la fatiga hizo acto de presencia: dos bases por bolas consecutivas a los dos Madera, Rigoberto y Yosvani, provocaron su salida del box, en medio del aplauso de la afición vueltabajera, en reconocimiento a su coraje sin límites. Su relevo, Amaury Sanit, permitió un sencillo del torpedero Onel Olivera que fletó la segunda carrera pinareña. En el cuarto, la selección capitalina estuvo imprecisa a la defensa. Luego del jit de Rigo Madera, Sanit recogió el toque de Yosvani y tiró sin tiempo a segunda, para dejar con vida a los corredores. Olivera fue víctima de un engarce espectacular de Tabares, pero luego de una jugada forzada, José Estrada arrancó para segunda, el receptor Alden Mesa disparó a la intermedia, pero en lugar de perseguirlo para buscar el tercer out del inning, Scull prefirió tirar a tercera, donde se produjo una discusión por el quieto cantado. Y Miranda se encargó de fletar las dos carreras cuando Sanit, en conteo de 3 y 2, le lanzó una recta por el centro del plato. Era más que suficiente para conseguir el triunfo, pero la selección vueltabajera marcó dos más en la sexta, remolcadas por Estrada con doblete sobre un lanzamiento de Lázaro Valle (Sanit explotó después de permitir el segundo jit de Olivera) y clavó el puntillazo en la octava por sencillo impulsador de Yobal a costa de Luis Alberto González, cuarto lanzador de los azules. Hoy y mañana serán días de descanso. La
semifinal oriental dará inicio el viernes 27, a las 8:00 p.m, en el estadio Guillermón
Moncada con el primer enfrentamiento entre Santiago de Cuba y Camagüey. El sábado, a la
misma hora, el Capitán San Luis será escenario del choque inicial de la semifinal
occidental entre Pinar y Habana. |
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