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 La fórmula de Maritza El líquido para sistemas y mecanismos hidráulicos Marex ya cubre mucho más del 80 por ciento de las demandas de organismos y entidades del país EMILIO DEL BARRIO MENENDEZ El laboratorio La Ceiba, en Ciudad de La Habana, es una pequeña empresa donde apenas laboran 20 personas. Sin embargo, su producción fundamental, líquido hidráulico, abastece mucho más del 80 por ciento de las demandas estatales y le reporta a la economía del país importantes ahorros por sustitución de importaciones. El año pasado se dejaron de gastar un millón 146 000 dólares.
Maritza Fuentes, la creadora En esa pequeña industria, donde todos hacen de todo, se produce el ya muy conocido líquido para sistemas y mecanismos hidráulicos Marex. Producto que no es resultado de la casualidad, tiene su historia. En la primera mitad de la década de los 90, en los momentos más críticos del período especial, el general de división Senén Casas, en su condición de Ministro del Transporte por aquellos años, ante la carencia de recursos financieros para adquirir insumos que garantizaran el funcionamiento del transporte de todos los organismos del país, entre otras decisiones, orientó la formación de un grupo para producir líquido hidráulico en Cuba.
El Instituto de Investigaciones del Transporte designó a la joven química Maritza Fuentes para dirigir un pequeño colectivo en la búsqueda de una fórmula. Y así Maritza, junto a Aleida López y Ricardo Perdomo, iniciaron la investigación. En poco tiempo la logró. Pasó las pruebas y comenzó a producirse. Por falta de líquido para frenos y embrague el transporte ya no se pararía en Cuba. Hoy por hoy prácticamente todos los organismos y entidades del país utilizan Marex como líquido para sus equipos y no solo de transporte, pues también se emplea en tractores y puede usarse en alzadoras cañeras. Organismos como el MINAZ, MININT, MINFAR, adquieren directamente el producto en el laboratorio La Ceiba, otros lo hacen a través de entidades comercializadoras del SIME y Comercio Interior. Tal es la calidad de la fórmula de Maritza y sus colaboradores —al producto se le nombró Marex, como reconocimiento a ella—, que la demanda se ha extendido al mercado en divisas al detalle donde ha desplazado a reconocidas marcas internacionales. Hoy es un producto líder. La iniciativa creadora de Maritza, hoy subdirectora de producción y ventas de la pequeña empresa La Ceiba, y del reducido colectivo que dirige, no se estancó. Como resultado de investigaciones llevadas a la práctica, la lista de nuevos productos destinados al sector del transporte se ha incrementado: descarbonizantes para motores de combustión interna y hornos; desincrustantes para limpieza de radiadores, calderas...; refrigerantes, para sistemas automotores, detergente amoniacal, líquido bactericida empleado en servicios de aviones, ómnibus, terminales de pasajeros..., ambientadores... En estos momentos en el laboratorio La Ceiba se producen 13 productos diferentes destinados al sector del transporte, cuyo objetivo es seguir favoreciendo al país mediante la sustitución de importaciones. Los costos de producción de la pequeña entidad,
perteneciente al Instituto de Investigaciones del Transporte, la oportunidad en las
entregas y, sobre todo, la alta calidad de sus ofertas, les confieren a sus productos una
favorable posición en cuanto a competitividad, la cual se verá reforzada cuando se
concluya el proceso de certificación de las normas ISO 9001. |
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La
alta calidad 