 Información del Ministerio del Interior

Luego de un riguroso y complejo proceso investigativo y de
instrucción serán presentados a los tribunales los salvadoreños Raúl Ernesto Cruz
León y Otto René Rodríguez Llerena, y los guatemaltecos, María Elena González Meza,
Nader Kamal Musalam Barakat y Jazid Iván Fernández Mendoza, participantes en acciones
terroristas contra la República de Cuba, y miembros de una red con base en
Centroamérica, dirigida y financiada por la organización terrorista "Fundación
Nacional Cubanoamericana" (FNCA), asentada en Miami.
Como se informó, Cruz León (de 27 años de edad), capturado el 4
de septiembre de 1997, es el autor confeso de seis hechos de terrorismo con la
utilización de artefactos explosivos contra los hoteles capitalinos "Capri",
"Nacional", "Copacabana", "Tritón", "Chateau" y
el restaurante "La Bodeguita del Medio", y como resultado de sus acciones murió
el ciudadano italiano de 32 años Fabio Di Celmo y otras siete personas sufrieron heridas.

Otto René trasladó más de un kilogramo y medio de explosivo oculto en los seis
medios que le entregó Posada Carriles.
Por los resultados de una investigación rigurosa, a la que se
añaden las declaraciones del detenido y diversas fuentes, incluidos medios de prensa
estadounidenses y centroamericanos, se comprobó la pertenencia de este individuo a la red
salvadoreña de mercenarios organizada y pagada por la FNCA, conexión en la que aparecen
involucrados el connotado terrorista Luis Posada Carriles, autor intelectual del atentado
contra la aeronave de Cubana de Aviación que explotó en pleno vuelo el 6 de octubre de
1976, y varios directivos de la Fundación que participan como financieros y
planificadores de estos hechos.
El reclutador de Cruz León, el salvadoreño Francisco Chávez
Abarca, le confesó al detenido que con anterioridad "había colocado artefactos
explosivos en Cuba bajo las órdenes de terceros que financian la operación".

Se ilustran las cuatro cargas explosivas que se pueden formar a partir de los
elementos ocupados a los guatemaltecos.
Las investigaciones posteriores ratifican estas declaraciones sobre
las conexiones de Chávez Abarca con Posada Carriles y otras personas de origen cubano
residentes en Estados Unidos, y confirman que es el autor directo de la colocación de dos
artefactos explosivos en instalaciones turísticas cubanas en abril de 1997.
Asimismo, según informaciones disponibles Chávez Abarca viajó a
México del 22 al 25 de mayo de 1997, y el día 24 se produjo una explosión en las
oficinas de la empresa "Cubanacán" en la capital de ese país, lo que lo hace
sospechoso de ser el autor directo de esta otra acción. Por la información disponible se
conoce que este ciudadano de baja catadura moral y amplia trayectoria delictiva, es un
típico matón de los que abundaban en los escuadrones de la muerte, quien encontró un
nuevo empleo en el mercenarismo promovido desde Miami y New Jersey.
El otro detenido salvadoreño, Otto René Rodríguez Llerena (40
años), fue capturado en el Aeropuerto Internacional "José Martí" el 10 de
junio de 1998, cuando intentaba introducir en el territorio nacional un kilogramo y 519
gramos de explosivo plástico de alto poder rompedor, dos cápsulas detonantes y otros
medios para realizar actividades terroristas.

Forma en que venían embutidas las sustancias
explosivas en el interior de uno de los frascos de champú.
En las investigaciones realizadas y las declaraciones del detenido
se estableció que este ciudadano también fue el autor de una explosión ocurrida en el
lobby del hotel "Meliá Cohíba" el 4 de agosto de 1997.
Rodríguez Llerena reconoció que el organizador y abastecedor de
los medios para ambas acciones fue Luis Posada Carriles, quien se identificaba como
Ignacio Medina -una de las identidades falsas que utiliza- y después de varios contactos
le propuso traer una bomba a Cuba y le recomendó colocarla en hoteles o museos, sin tener
en cuenta las víctimas que pudo haber causado a partir de la potencia del explosivo
utilizado. Posada Carriles le entregó los medios y le mostró cómo programar y ensamblar
el artefacto. Además le facilitó los pasajes, el resto de la documentación y le pagó
mil dólares por la primera acción y los gastos de estancia en nuestro país.
Los ciudadanos guatemaltecos María Elena González Meza (54 años)
y Nader Kamal Musalam Barakat (28 años) fueron detenidos el 4 de marzo de 1998, cuando
con fachada de turistas pretendían hacer estallar cuatro artefactos explosivos en lugares
con afluencia de público. Ese día habían llegado a Cuba en el vuelo 950 de la línea
aérea "Aviateca", que cubría el itinerario Ciudad Guatemala-Cancún-La Habana,
con 432 gramos de explosivo embutidos en cuatro pomos de champú y uno de desodorante,
además de cuatro detonadores eléctricos y otros medios enmascarados dentro de sus
pertenencias.

Embutido de la sustancia explosiva en el interior
del frasco de desodorante.
Jazid Iván Fernández Mendoza (28 años), esposo de María Elena,
fue detenido a su arribo a la capital el 20 de marzo de este año, cuando llegó con el
propósito de ayudar a salir del país a su esposa. Este individuo reconoció en los
interrogatorios que sabía de las actividades terroristas que vinieron a ejecutar María
Elena y Nader Kamal, y que él participó en la preparación del enmascaramiento de los
medios para activar los explosivos que éstos utilizarían, lo que se corroboró por las
declaraciones de los otros dos guatemaltecos.
Nader Kamal y María Elena afirman haber realizado varias acciones
delictivas en Guatemala vinculadas a asesinatos, asaltos, secuestros y robos, en algunas
de las cuales participó Francisco Chávez Abarca.
Los tres detenidos guatemaltecos reconocen también la
participación de Chávez Abarca en la organización de la operación y señalan como
dirigentes y financieros al directivo de la FNCA, Arnaldo Monzón Plasencia, a
"Ramón Medina" (otro de los seudónimos utilizados por Posada Carriles) y un
individuo a quien identifican como "el señor de New Jersey". María Elena
declaró que Arnaldo Monzón y "Ramón Medina" le debían dinero a Chávez
Abarca, y que en la casa de ella el terrorista salvadoreño recibió varias llamadas de
New Jersey.
Constan declaraciones de María Elena y Nader Kamal en las cuales se
expresa en detalles el papel desempeñado por Posada Carriles y Monzón Plasencia en la
organización y preparación de estos hechos. Además está determinado fehacientemente,
que este último es el encargado por la FNCA de dirigir las acciones desde El Salvador y
Guatemala, y aparece involucrado en anteriores actos de corte violento contra Cuba.
Monzón Plasencia -un delincuente internacional residente en New
Jersey con fachada de hombre de negocios- en las décadas de los años sesenta y setenta
estuvo vinculado a las organizaciones terroristas "Omega 7", "Movimiento
Nacionalista Cubano" y "Alpha 66", en los años 80 ingresó a la FNCA y a
partir de 1995 canalizó significativos recursos para la promoción de acciones criminales
contra nuestro país y comenzó el reclutamiento de mercenarios: gente de la peor calaña,
pandilleros, matones, ladrones y traficantes de armas, drogas o autos robados que
sirvieran de "soldados asalariados" desde terceros países a la guerra de la
FNCA contra Cuba. Así se formó el grupo terrorista centroamericano, bajo la dirección
de Posada Carriles, subordinado al grupo paramilitar de la Fundación.
Monzón Plasencia fue quien organizó, abasteció y financió el
primer hecho de colocación de un artefacto explosivo en un hotel, detectado en marzo de
1995 en Varadero, acción que marcó el inicio de la escalada terrorista de la FNCA.
(continuación) |