Viengsay Valdés, una estrella asomada al catalejo

La más reciente edición del espacio Catalejo, en la Casa de la Prensa, recibió como invitada a la primera bailarina Viengsay Valdés, subdirectora del Ballet Nacional de Cuba.

Ternura y calidez caracterizaron el encuentro en el que, desde las indagaciones y la anécdota, quedó al descubierto el excepcional ser humano que es.

En su dualidad profesional, como bailarina y directivo se calificó a sí misma de muy exigente, por lo que se esfuerza diariamente por mantener ambas responsabilidades en equilibrio, sin que la una sobrepase a la otra.

Desde la responsabilidad de dirigir la compañía, dijo sentir la necesidad de añadir nuevos objetivos artísticos y técnicos que eleven mucho más la calidad de los bailarines, respetando la esencia, los orígenes y el legado histórico de la Escuela Cubana de Ballet, que es patrimonio de la nación.

Con una carrera en ascenso que tomó más fuerza a partir del 2004, es considerada uno de los más sólidos valores de la institución. Sus actuaciones en los ballets Don Quijote, El lago de los cisnes y Giselle, entre otros, le han valido el reconocimiento dentro y fuera del país.