De entre un manojo de libros que ha mal acomodado sobre sus piernecitas, saca uno y se aferra a él. Espera, impaciente, y cuando, desde la mesa de presentaciones, se escucha: «¿Alguna pregunta?», «la bajita loca» entiende que es su oportunidad y pide que el papá de Chamaquili le firme el texto.
Están ella y otros tantos niños repletando la sala Dora Alonso de la Fortaleza San Carlos de la Cabaña, espacio que durante esta 30 edición de la Feria Internacional del Libro acogió la presentación de El Gran libro de Chamaquili, una reimpresión de ese título que viera la luz en 2015 y que es –«con el permiso de Mapá»–, una selección de los nueve primeros volúmenes que tienen como protagonista al Chamaquili de Alexis Díaz Pimienta, narrador, poeta y repentista.
De la Casa Editora Abril es este libro que ya no le pertenece al autor, como él mismo dijo, sino a sus hijos, quienes lo inspiraron en primer lugar, a Lucas Baños, que le ha puesto rostro y voz en la televisión nacional, y a todos los niños que se sienten ese personaje.
La «chambeluna» del campo, las primeras incursiones del inquieto protagonista en el teatro, los aviones, la nieve…, los reclamos por «sus derechos de domingo», las pesadillas, la despedida de los dientes de leche, el ferrocarril, los gatos, la lógica infantil que deja perplejos a los adultos, son algunas de las historias narradas en la antología.
Del ilustrador de los libros de la chamaquilada cubana, Jorge Oliver, también fue presentada la tercera parte de La Isla del Coco. Una vez más, el Capitán Plin y su tropa se enfrentan a Rui la Pestex en batalla campal, acompañado en esas peripecias por la gata Fénix, el Sapo Lope y los demás isleños.
Esta nueva entrega nació porque «para seguir haciendo caminos hay que saber de dónde venimos», porque «todos los isleños –los grandes y los nuevos– tienen derecho a conocer qué pasó antes para bien hacer lo que le toca hacer», como declaró el Coco Consejo.
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