ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA

Una definición sumamente abreviada de economía se refiere al conjunto de actividades concernientes a la producción, distribución, comercio y consumo de bienes y servicios por parte de los diferentes agentes económicos.

Otra definición, igual de simplificada, apunta a la ciencia que estudia los métodos más eficaces para satisfacer necesidades materiales humanas, mediante el empleo racional de bienes.

En la primera se establece un enfoque práctico. Si fuéramos a representarla mentalmente, quizá imaginemos a obreros trabajando en una fábrica, líneas de productos que luego son embalados, transportados, puestos en tiendas y, finalmente, comprados por el consumidor.

En la segunda definición, en tanto, se establece un enfoque académico. Es la actividad centrada en el estudio de sistemas y modelos económicos, así como de lo relativo a las diversas acciones de la micro y macroeconomía en una época determinada.

Ahora bien, ¿en cuál de las dos vertientes están nuestras principales dificultades?

La respuesta parece obvia: están en esas organizaciones productivas, comerciales y de servicios en las que es necesario detectar reservas y proponer soluciones adecuadas para aumentar la eficiencia económica.

Desde luego, no estoy afirmando que la labor científica no sea importante en la llamada economía real; todo lo contrario; pero en ella no participan solo los economistas. Por ejemplo, supongamos que se quiere introducir nuevas variedades de semillas, a fin de aumentar producción y disminuir costos agrícolas. En tales casos, el papel fundamental lo tendrían agrónomos, genetistas, biólogos.

El economista puede tener una participación más individual, digamos en decisiones relativas a los mercados financieros: acciones, bonos, derivados, criptomonedas, etc.; mas, por lo común, dentro del mundo empresarial no es así.

Por ejemplo, para lograr mayor eficiencia en un reactor químico, se requieren conocimientos de termodinámica, cinética química, transferencia de masa y energía; saberes que por lo común resultan ajenos al economista.

Ahora, desde un medio extranjero, acabo de leer un llamado a redimensionar la empresa estatal cubana, en tanto un grupo de ellas son irrentables. No se nos explica cómo se cubriría el vacío dejado por esas empresas; en cualquier caso, la opinión tampoco parte de un análisis in situ, entidad por entidad; a partir de dictámenes elaborados por especialistas en la actividad productiva.

Una empresa puede ser puntualmente irrentable y no por ello hay que cerrarla. Quizá sí, naturalmente, pero antes se deben realizar profundos estudios multidisciplinarios, para determinar si la situación es reversible en un plazo aceptable.

Las causas de la irrentabilidad empresarial pueden ser múltiples: coyuntura de precios, tecnología obsoleta, averías, problemas de financiamiento, dificultades en las cadenas de suministros, puesta en marcha de nuevos equipos, y, desde luego, también mala administración.   

Así, para aventurar una opinión especializada, entre otros asuntos primero habría que conocer si hay o no inversiones en curso, si se acometen reparaciones, mejoras tecnológicas o de la organización del trabajo, y qué resultados se esperan de semejantes acciones.

Se ha de partir de lo que, en lenguaje técnico, se conoce como «break even point», análisis del umbral de rentabilidad, con el objetivo de detectar reservas en gastos fijos y variables, así como qué pudiera hacerse para aumentar los niveles de ventas.

En fin, no es con abstracciones vertidas desde un lejano y cómodo buró que se puedan resolver las dificultades económicas del país. Con esto no se ayuda a personas concretas, que en empresas concretas, se esfuerzan para realizar producciones concretas. Por demás, tampoco con esto se le hace favor al oficio.

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Julio Carmelo Arias Huergo dijo:

1

24 de febrero de 2024

11:51:28


De acuerdo con UD. Pero, al margen de lo que plantean lis "cubanologos", si es imprescindible revisar y redimensionar nuestro sistema empresarial, algo que era necesario acometer ya desde la década de los '90 e inicios de este siglo, y siempre se ha pospuesto. Y nuestro sistema empresarial, que sin dudas está sobredimensionado, nos ha costado muchísimo, ha tenido que recibir mucho subsidio, restándole recursos a otras actividades e incrementando el déficit presupuestario. Es algo a lo que "hay que meterle con la manga al codo" y no buscar la rentabilidad de empresas subiendo precios o vendiendo productos ajenos a su actividad, como ha hecho, entre otras, "Labiofam" al comercializar pastas alimenticios, conservas de tomate, embutidos cárnicos importados, o la industria alimenticia vendiendo botas, carteras, detergentes, etc.

Omar Medina dijo:

2

26 de febrero de 2024

00:48:05


Buenos argumentos, queda claro lo difícil del trayecto actual. Parece realmente complejo decidir el sentido de una economía solo a través de la espontaneidad en cifras del enfoque práctico; o del enfoque académico y sus corolario teórico por separado. Más aún cuando ambos se dicen seguidores y estar apegados por igual a la ciencia, tanto desde sus puntos de vista práctico así como teórico. La experiencia expresada como espiral de justicia social apunta a que ambos sólo pudieran tener mayor alcance si acompañan a las mayorías, que lograron el poder político en la lucha contra el dominio económico que concentró la riqueza y sometió a las mayorías a intereses minoritarios a través de métodos discriminatorios de todo tipo desde el aparato del Estado. Seguramente muchos, sino todos ya hemos presenciado y participado en debates sobre acciones, tareas, planes, utopías, programas, políticas económicas a seguir. La participación nos debe prevenir que ninguna decisión debe quedar al margen del balance justo en todos los peldaños de la distribución y la redistribución de riquezas entre las fuerzas que sostienen el proceso socio político y su proyección económica para comenzar un nuevo ciclo de producción potenciada por su realización en el mercado o en la sociedad. Mientras más fuerzas se logren incorporar a los procesos de toma de decisiones a todos los niveles menor margen de errar en la política a trazar. La especialización erudita necesaria debe ser custodiada por la simpleza de ver el bosque desde la generalidad. Ayuda a no perdernos arbol por arbol, palo a palo metido dentro de él. Así, con esa simpleza de pueblo también puede verse si crece y avanza nuestra foresta socialista. Gracias.

Ramón Labañino dijo:

3

26 de febrero de 2024

20:56:39


Interesante aporte. En la medida que apliquemos más la ciencia y los avances mas modernos que aporta la academia, a la practica productiva y esta se ejecute con la mayor calidad y celeridad posible, podremos alcanzar mejores frutos en la productividad, en creación de bienes y prestación de servicios. La economía como ciencia, aun sin ser exacta, todo forma parte de un sistema único, indivisible, sistémico e intervinculado. El mismo problema puede tener múltiples causas, tanto como aplicar una medida tiene también múltiples efectos. La economía es un sistema vivo que responde a estímulos y desestimulos, de acuerdo a leyes propias (independientes de la voluntad de los hombres) que la rigen. Ejecutar un plan bien calculado, coordinado, científico, de todos los factores económicos que te aporten al crecimiento y de este al desarrollo, es el gran reto de la economía , no solo de Cuba, sino del mundo.