ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
En los escritos de Martí podemos encontrar respuestas a las preguntas más difíciles. Foto: Juvenal Balán

He leído con placer decenas de mensajes escritos en el sitio de la Presidencia, a propósito de la convocatoria de enero para rendir justo homenaje al más universal de los cubanos. Algunos son tan hermosos que dan ganas de reproducirlos como grafitis.

Aunque solo escriben nombres o seudónimos, no oficios ni edades, es muy reconfortante advertir que, además de numerosos martianos conocidos, son mayoría los educadores y los jóvenes interesados en hacer públicos sus sentimientos hacia Martí.

Ela, maestra de círculos, ha escrito que se emocionó mucho cuando les habló sobre Martí a niños de 5to. año de vida, porque en ese momento ellos, espontáneamente, corrieron a abrazar y besar el busto junto al que ponen flores cada mañana.

Enrique, joven profesional, cuenta orgulloso que, siendo niño, representó al Apóstol en una parada martiana en su pueblo natal, Placetas, y que al graduarse de la Universidad subió la bandera cubana hasta el Pico Turquino solo para rendirle homenaje.

Como afirma Yamaris Pedraza, «todo cubano tiene un Martí dentro, todos hemos leído e interpretado sus obras, pensamientos».

¡Y cómo hay pensamientos de Martí iluminándonos! Tengo amigos memoriosos que lo citan constantemente para probar que habló de todo, que tocó todos los asuntos y que en sus escritos podemos encontrar respuestas a las preguntas más difíciles. Nuestras escuelas podrían organizar concursos para encontrar sentencias martianas útiles al crecimiento humano. Verán qué manantial de valores éticos los inundan.

A Pedro Pablo Rodríguez, director de la edición crítica de sus Obras Completas, le escuché una vez que aquel hombre que solo vivió 42 años, dejó un legado realmente infinito. De forma tan frecuente y constante aparecen novedades relacionadas con Martí, que su trabajo parece que no terminará nunca.

Esa obra y la que ha generado su estudio en Cuba y por todo el mundo, anda ya por las redes sociales, ­donde hay muchachos que lo comparten y entienden, al fin, que hay mucho Martí por conocer debajo de la prosa y el verso que los fascinan. Descubren emocionados que no es un hombre del siglo pasado sino de todos los siglos.

¿Pero eso es de Martí?, preguntan muchos, asombrados de la extraordinaria vigencia de sus afirmaciones y de la universalidad de los asuntos que abordó.

Cuando los más nuevos –sean niños o jóvenes– descubren que el hombre de la Edad de Oro ­escribió también cosas tremendas para adultos ­sobre el ­orden universal y los peligros que todavía nos acechan, ya les resulta imposible desprenderse de la necesidad de buscarlo. Si lo encuentran y entran en sus esencias, ya nada podrá separarlos del encanto de su palabra. Y se vuelven invencibles.

Pero, como decía el propio Martí en el manifiesto del Partido Revolucionario Cubano (PRC) a Cuba: «La patria es sagrada, y los que la aman sin interés ni cansancio, le deben toda la verdad».

No quiero ni puedo exagerar. Aún no está Martí como quisiéramos y como hace falta que esté, para terminar de bordar el alma de nuestros hijos y de los hijos de nuestros hijos. Seguimos y seguiremos necesitando a Martí, siempre. Y es nuestra responsabilidad enseñarlo, sabia y amorosamente, como solo los buenos padres y los buenos maestros saben hacer.

Un golpe salido de las entrañas del odio nos sacudió hace poco la conciencia en relación con la perniciosa rutina que nos hizo olvidar el cuidado de los bustos martianos. No la pieza material que nos acompaña desde la niñez, sino su integridad, el símbolo que encierra.

Los hechos posteriores vinieron a probar cuánto significa estar junto a Martí, en el bando de los que aman y fundan. O contra Martí, en el bando de los que odian y destruyen.

Hoy es 24 de febrero. Han pasado 125 años del inicio de la más noble de las guerras. La que organizó y dirigió Martí, definiéndola como «guerra entera y humanitaria, en que se une aún más el pueblo de Cuba, invencible e indivisible».

Está escrito en el Manifiesto de Montecristi, donde él y Gómez invocaron «como guía y ayuda de nuestro pueblo, magnánimos fundadores, cuya labor renueva el país agradecido, y al honor, que ha de impedir a los cubanos, herir de palabra o de obra, a los que mueren por ellos».

Fue el 25 de marzo de 1895, en vísperas del largo viaje que los traería a la Patria, donde ya combatían por la independencia los patriotas veteranos y los pinos nuevos que solo Martí pudo levantar y juntar con su descomunal fe «en el mejoramiento humano y en la utilidad de la virtud». Esa fe sostiene nuestra legendaria resistencia. Cuidémosla todos, adentrándonos en Martí.

(Publicado ayer en el sitio de la Presidencia)

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José Rafael Coss Ponton dijo:

1

25 de febrero de 2020

06:02:07


Ver en google el libro: José Marti: Guerrero del Amor (Origenes y desarrollo de su pensamiento espiritual). “La única verdad es el amor.” JM

Antonio Reyes Sanchez dijo:

2

25 de febrero de 2020

09:30:20


Debemos producir mas audiovisuales, peliculas, cortometrajes etc, que reflejen la vida y obra de Marti. Un ejemplo fue "El ojo del canario", obras que como "Inocencia" llegan a todos. Que siga la marcha.

Dr. José Luis Aparicio Suárez dijo:

3

25 de febrero de 2020

10:40:41


Nuestro Apóstol diría hoy, como seguramente sintió en su tiempo, que no hay gloria mayor que pensar y hacer por Cuba, que es, al mismo tiempo, meditar y realizar por la humanidad.

Celia dijo:

4

25 de febrero de 2020

13:51:39


Recientemente, en la Feria del Libro, tuve la posibilidad de adquirir el libro: Los escudos invisibles. Un Martí desconocido, del autor Raúl Rodríguez La O. Recomiendo su lectura por el nivel de información rerspecto a facetas poco conocida sobre Martí, especialmente las relacionadas con la organización que pilotó nuestro Héroe en la actividad de espionaje y contraespionaje, al mismo tiempo que preparaba y organizaba el Partido Revolucionario Cubano y la lucha independentista con total discreción y desconfianza, pues eran armas que no descuidaba. Mi sugerencia es que este libro sea material de estudio en la enseñanza cubana, pues se entiende muy bien el por qué en Cuba ha existido una sola REVOLUCION. A usted Presidente Díaz Canel, el respeto de su pueblo que lo admira por ser continuidad del pensamiento MARTIANO, FIDELISTA y de Raúl….. “En las manos de todo no podemos poner nuestro pensamiento, porque sería lo mismo que entregarlo al enemigo, que tiene tantos lomos a sus pies.”. José martí

Orestes Oviedo dijo:

5

26 de febrero de 2020

11:25:05


En el articulo TENEMOS UNA DEUDA CON LA CULTURA Y CON MARTÍ El ex-presidente uruguayo sorprendió con su discurso a todos los presentes durante la conferencia impartida en la sala Che Guevara de la Casa de las Américas Granma 26 de enero 2018 Autor: Diana Ferreiro | diana@granma.cu Autor: Ernesto Lahens Soto, estudiante de Periodismo | internet@granma.cu http://www.granma.cu/cultura/2016-01-26/tenemos-una-deuda-con-la-cultura-y-con-marti-26-01-2016-23-01-03 Cuando la 57 edición del Premio Literario Ca¬sa de las Américas anunciara la presencia en el evento del expresidente uruguayo José Mu¬jica, nadie sabía con exactitud cuál sería el tema de su conferencia. Podíamos pensar, por intervenciones en otros escenarios, que Mujica se referiría a la integración latinoamericana, o al cambio climático y la desaparición de la especie humana. Y habló también de ello. Lo que no imaginábamos, al menos no la ma¬yoría, era que Mujica convertiría a Martí —nuestro Martí— y a la cultura, en el centro de su discurso de anoche en la Sala Che Guevara de la institución. “Los que nos llamamos más o menos de iz¬quierda, tenemos necesidad de acudir a fuentes co¬mo Martí”, dijo Mujica y conversó entonces so¬bre el Apóstol y su visión independentista. Habló del Martí revolucionario, escritor, ensayista, enamorado, “enfermo de humanismo”. “No es la liturgia de recordar a Martí, solo por hacerle un homenaje, VAMOS AL BAÚL A BUSCAR HERRAMIENTAS INTELECTUALES QUE NOS SIRVAN PARA ESTA LUCHA DE HOY. La historia nunca está terminada porque cambia la perspectiva con la cual nos miramos”, aseguró. Y, entre otras cosas, lo definió como “un puente entre los viejos gestores de la independencia latinoamericana y los desafíos del porvenir. TENEMOS DEUDAS CON MARTÍ”, AFIRMÓ. En un mundo enajenado y cada vez menos inclusivo, a Pepe Mujica le preocupa el abandono de la cultura. Por eso, estar en la Casa es para él —lo confesó—, un honor no merecido. “Este es un templo que simboliza el esfuerzo más comprometido de la cultura latinoamericana, con la cual tenemos una deuda vieja”, agregó. “Mi generación pensó que si lográbamos cambiar las relaciones de producción y distribución, creábamos las condiciones físicas para un hombre nuevo, y nos quedamos cortos, nos quedó en el tintero el formidable papel de la cultura”. Pero Mujica habla también de la cultura fuera de las bellas artes, “esa cultura con olor a cocina”, natural, de historias y tradiciones que forman pueblos, y que nos han enseñado a vivir juntos. “No hay nada más valioso en la lucha por la vida que la existencia de los otros, de la comunidad, lo que cuesta es la interrelación. Ro¬binson Crusoe se hubiera muerto de frío, de angustia, pero la civilización había creado el lenguaje y otras cosas. No estuvo solo, solo no iba a ningún lado. Estuvo con la herencia de la civilización”, dijo. Durante la conferencia, el expresidente uruguayo insistió en que aún tenemos UNA DEUDA CON LA CONSTRUCCIÓN DE UNA CULTURA CONTESTATARIA DISTINTA, UNIDA A LA LUCHA POR LA VERDADERA LIBERACIÓN DE LA HUMANIDAD, ante esa cultura que quieren, a toda costa, imponernos las grandes potencias que gobiernan al mundo. Una lucha, si se quiere, también por la vida. El expresidente Mujica hablo de la DEUDA CON MARTÍ, por no ser consultado y analizado sus pensamientos, para con esas armas COMBATIR LAS IDEAS ENAJENANTE QUE PROPONEN LA DIVISIÓN y GANAR LA GUERRA AL GIGANTE DE LAS SIETE LEGUAS, pues EL VIVIÓ EN EL MONSTRUO Y CONOCE SUS ENTRAÑAS. Una forma de garantizar la presencia de José Martí en nosopros es que en el sistema de educación exista una asignatura para el Estudio y la obra del Apostol y se publique en los medios de difusión todos los dias, algo de su obra como los articulos NUESTRA AMERICA, CON TODOS Y PARA EL BIEN DE TODOS, LOS PINOS NUEVOS, LA CONFEENCIA PANAMERICA, el ESTUDIOS SOBRE LOS eSTADOS UNIDOS y otro. HONRAR, HONRA SALUDOS oVIEDO