El multirecordista de dominio de balón Erick Hernández Sánchez se prepara para consignar una nueva primacía global de la especialidad, este sábado 31 de agosto, en el lobby del Hotel Be Live Havana City Copacabana, en un intento por destrozar en mayor tiempo dominado la esférica con los pies desde la posición de sentado y con una carga de un kilogramo y medio en cada uno de sus pies.
El 15 de julio de 2023 fue la última vez que el habanero volvió sobre esta modalidad, que en aquella ocasión le llevó realizarla un tiempo de tres horas, cuatro minutos y dos segundos.
En conversación con Granma señaló que su preparación consistió fundamentalmente en abdominales de piernas y de tronco, ejercicios para robustecer gemelos, bíceps femorales, cuádriceps y abductores; y en cuanto al tren superior, el entrenamiento estuvo encaminado a fortalecer los esternocleidomastoideo, hombros en su totalidad, bíceps y tríceps; además de la zona lumbar y dorsal.
«Menos tiempo le dediqué a la carrera, por lo que gané mucho en masa corporal y en el tren superior», dice.
— Cada vez se hace más difícil encarar esta modalidad, ¿cuál ha sido tu principal motivación?
— En mi criterio mejoré la estrategia, le dediqué más tiempo a los ejercicios de fuerza y menos tiempo a las carreras de largo aliento, para no sufrir tanto desgaste debido a la edad y mi dilatada trayectoria deportiva, sin dejar de tener en cuenta que cada vez es más difícil implantar nuevos récords.
Esto conlleva alta dosis de preparación física y psicológica.
— En abril de este año conseguiste algo sumamente complicado, implantaste marca de 12 horas, seis minutos y diez segundos dominando la pelota solo con los pies desde la posición de parado. ¿Te sientes preparado para realizar esta nueva hazaña?
— Creo, que sí. Quince días después de lograr esta meta comencé a incentivarme en torno a este proyecto, y si se cumple lo programado considero que sí puedo batir lo hecho en 2023.
Con 58 años a cuestas, Hernández incrementa su entrenamiento de cara a esta jornada sabatina, que volverá a encender reflectores en este hotel citadino, enclavado al oeste de la urbe.
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