Reñida jornada de apertura del Sub-23

Regresó la pelota con el campeonato Sub-23, y lo hizo con una invocación a la pasada 61 Serie Nacional. Al menos desde el montículo nos llegaron pasajes de la pasada temporada, pues todos los abridores pasaron por las nóminas de aquella campaña.

Por ejemplo, en Holguín los de casa recibieron a sus vecinos de Granma, con labor de seis entradas del derecho Michel Cabrera, un lanzador de significativo aporte en el repunte de la segunda mitad de los Cachorros en el torneo de marras. Sin embargo, no estuvo atinado en la lomita, sobre todo con su control.

No es casual la presencia de varios de los peloteros del certamen de mayores en el Sub-23, pues hasta esa edad la 61 versión de la Serie Nacional encontró en sus nóminas a 238 jugadores, lo que equivalió a un 37,18 %, casi un 40 %, lo que no es despreciable. Tanto es así que, de la contienda en la que Granma ganó su cuarta corona, solo un conjunto, Matanzas tuvo menos de diez efectivos con 23 años o por debajo de esa edad, en cambio los Alazanes inscribieron a 17, dos de ellos, Darián Palma y Francisco Venecia, alinearon ayer frente a los holguineros.

La jornada inicial fue bien reñida: cinco de los siete partidos se decidieron por la mínima, y como este es un calendario muy corto, ganar de visitador, además, en la serie de tres choques, como las de esta semana, es vital. En este aspecto, cinco de los visitantes vencieron a sus rivales.

El tunero Yaser Pérez se llevó los titulares con el madero. El defensor de la primera base y cuarto bate de los pequeños Leñadores pegó dos jits en tres turnos, ambos jonrones, con los cuales anotó par de carreras e impulsó cuatro de las ocho de su equipo. Aunque no se anotó el crédito del triunfo, lo mejor desde la tabla de lanzar lo suscribió Andy Quesada, en la victoria de Matanzas sobre Mayabeque: en cinco y dos tercios ponchó a ocho y dos boletos, con solo cuatro imparables permitidos.

ANOTACIÓN POR ENTRADAS

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