Tenía razón el técnico, los Búfalos van camino a la décima

Los Búfalos del baloncesto cubano tienen una espina clavada: la no clasificación, en 2018, a la Liga Superior de Baloncesto (LSB), cuando, por un punto, perdieron la oportunidad ante Sancti Spíritus. No era cualquier equipo el eliminado, era el que reinó por más de diez años, con nueve títulos y tres medallas de plata.

«Volveremos a guerrear, a alegrar a nuestros seguidores. De nuevo levantaremos las tribunas y celebraremos», la profecía la lanzaba al aire Vanier Reyes, uno de los históricos, aunque sin mucho ruido. Y lo visto hasta hoy le ha dado la razón.

Cuando no clasificaron se vio a Yasser Rodríguez Alfonso, uno de sus líderes, disculparse con los aficionados. La vergüenza la expresaron también Haití, Granda, Vanier –actual capitán de la manada–, quienes, entonces, salieron con la cabeza gacha.

Jorge García Quintero, quien como jugador compartió momentos de alegría en la época dorada, ahora dirige el colectivo técnico y, desde los entrenamientos, ya hablaba con optimismo sobre las aspiraciones de los Búfalos en esta LSB, cual si estuviera viendo el presente, con ocho victorias sin derrotas, único invicto de la lid.

«Pudiera parecer pretencioso, pero vamos a luchar por ganar la décima corona. Tenemos una nómina para respetar, con el regreso de Yoán Luis Haití, rejuvenecido; William Granda en excelentes condiciones, Vanier Reyes muy fuerte, con unas libras menos; Yasser Rodríguez está muy motivado, más los refuerzos camagüeyanos Yordany Jaca y Yoimar López.

–¿Cómo se han integrado los dos a la manada?

–Muy bien. Jaca tiene mucha ascendencia en los Búfalos, desde hace años, y es uno más entre nosotros, igual que Yoimar, quien muestra excelente forma deportiva.

–¿Sientes al equipo entre los favoritos?

–Sí, pero sin confiarnos. Desde hace tres años esperamos por este momento. Nos preparamos muy bien, como para decir: aquí están de nuevo los Búfalos. Respetamos al contrario, el 2018 pasó, estamos en 2022.

 –¿Pero el juego es el que dice la última palabra?

–No he dicho que seremos campeones. Sería atrevido y autosuficiente. Afirmo que aspiramos al trono, y no lo vamos a dejar escapar fácilmente. Verán a un equipo cohesionado, con una mecánica de juego ajustada, en lo táctico y en lo técnico, en el que todos, sin excepción, aportarán.

–¿Es incómodo dirigir a quienes jugaron con usted?

–Al contrario, ayuda y facilita el trabajo. Sé cómo piensa cada uno. Más que respetarme, me quieren, porque soy uno más. Las decisiones las colegiamos, incluso, con los propios jugadores.

–¿Principales rivales?

–Todos.

–¿Y si no clasifican?

–Sería un desastre, por eso no nos confiamos.