El presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, consideró un éxito la celebración de los Juegos Olímpicos de Invierno en Beijing, los cuales concluyen mañana. El máximo directivo del ente deportivo mundial destacó, especialmente, las medidas de control y prevención epidemiológica.
Este reconocimiento coincide con la noticia de que las autoridades sanitarias de China informaron, este viernes, que detectaron 435 casos de COVID-19 entre los miembros de las delegaciones extranjeras que llegaron a su capital para competir en los Juegos.
Informaron que entre los enfermos hay atletas, funcionarios y personal de apoyo, muchos identificados tras su arribo a Beijing y otros desde el comienzo de las pruebas.
A pesar de ello, nunca hubo transmisión del coronavirus SARS-COV-2 (causante de la patología) dentro de la burbuja olímpica, y las medidas epidemiológicas funcionaron sin fallas.
La acogida de Beijing ha causado tanto impacto que, de acuerdo con Prensa Latina, el propio Bach reveló que las federaciones de deportes invernales planean con China desarrollar en este país varios campeonatos de élite en la próxima temporada fría.
Mañana, cuando concluya la cita, empezará un breve compás de espera, hasta que los paralímpicos invernales vuelvan a hacer brillar a Beijing, del 4 al 13 de marzo.
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