Seis fallecidos y 59 lesionados fue el saldo preliminar de un accidente masivo que se produjo en las primeras horas de la mañana de este lunes, al impactarse de frente dos ómnibus que transportaban trabajadores hacia y desde instalaciones hoteleras del destino turístico Jardines del Rey, al norte de Ciego de Ávila.
Los fallecidos se nombran Yuniester Oliva Artiles y Yohelvis Reino Veitía, ambos de Ciego de Ávila, y los trabajadores del turismo Ezequiel Díaz Matos (Baraguá), Daniel Trujillo Rodríguez (Morón), Yaensy Conde Vega (Ciro Redondo) y Javier Hernández Zamora (Ciro Redondo).
El accidente se produjo a la salida de Morón, en la carretera de Turiguanó, cuando el conductor del ómnibus que transitaba desde Ciego de Ávila al destino Jardines del Rey invadió la senda contraria, por la cual se desplazaba el que transportaba trabajadores del turismo.
De manera inmediata, los sistemas de emergencia médica asistieron a los afectados, que se encuentran en los hospitales Roberto Rodríguez, de Morón, y Antonio Luaces Iraola, de Ciego de Ávila. A ambos lugares la población acudió de manera masiva y voluntaria a donar sangre.
En el lugar del hecho se personaron las principales autoridades de la provincia, del municipio y del Ministerio del Interior, encabezadas por Julio Heriberto Gómez Casanova, primer secretario del Comité Provincial del Partido, y por el gobernador Alfre Menéndez Pérez, quienes posteriormente se trasladaron a las instalaciones hospitalarias.
Kesnel Lima Ruiz, director general de Salud en el territorio, aseguró que se cuenta con todos los recursos, insumos, y medicamentos para la atención a los pacientes en ambos recintos hospitalarios.
NO ATENDER AL CONTROL DEL VEHÍCULO, PRIMERA CAUSA DE ACCIDENTES EN CUBA
En materia de accidentalidad en Cuba, ninguna acción que se realice es suficiente para salvaguardar la vida humana, y aunque 2024 registró indicadores inferiores en accidentes, lesionados y fallecidos en comparación con el año que le antecedió, es un comportamiento que lleva un análisis más crítico.
Así lo expresó el vice primer ministro, Jorge Luis Tapia Fonseca, al presidir, este lunes, la reunión de la Comisión Nacional de Seguridad Vial, junto al ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila. Agregó que se debe modificar el funcionamiento de esta instancia a nivel nacional y provincial.
Dijo que se mantienen problemas en la disciplina de los choferes, al tiempo que instó a incidir, de forma más efectiva, en la educación vial y en la responsabilidad tanto de la población como de los administrativos.
Subrayó la necesidad de perfeccionar los controles con los gps y analizar la situación de los principales viales del país, que aunque de forma general presentan mal estado, no es la principal causa de los siniestros.
El titular del Transporte significó que el trabajo se debe enfocar en acciones concretas; entre ellas, realizar análisis con la totalidad de los conductores de las empresas transportistas a nivel nacional, junto a los comités técnicos asesores, las direcciones provinciales de Transporte y las universidades, para profundizar en las causas y condiciones que influyen en la accidentalidad.
Rodríguez Dávila destacó que se debe realizar un reajuste en el plan de inspecciones del año, e incrementar la atención de los usuarios en la vía, además de revisar las capacidades de las escuelas de conducción y oficinas de trámites de licencia de conducción, para evitar que los choferes circulen sin el correspondiente documento.
El coronel Roberto Rodríguez Fernández, jefe del Órgano Especializado de Tránsito de la Dirección General de la Policía Nacional Revolucionaria, dijo que en 2024 las acciones de prevención y enfrentamiento permitieron reducir los tres indicadores en comparación con 2023.
Recalcó que los accidentes disminuyeron en un 12 %, aunque se registraron 7 507; los fallecidos se redujeron en un 13 %, con 634; y los lesionados en un 4 %; alcanzando la cifra de 6 613. No obstante, hubo un crecimiento del parque vehicular, fundamentalmente, de medios tan vulnerables como las motos y los ciclomotores.
No prestar la debida atención al control del vehículo se ratificó como la primera causa de accidentalidad en el país, con el 30 % de los siniestros.
Agregó que el irrespeto al derecho de vía muestra una disminución del 10 %, y aunque por ocurrencia es la segunda causa, representa el mayor número de fallecidos, con el 29,9 %.
Destacó que el exceso de velocidad como causal decrece en los tres indicadores, pero continúa siendo extremadamente peligroso. Cada accidente registra, al menos, un lesionado, y cada siete hechos un fallecido.
Unos 665 conductores se encontraban bajo el efecto de bebidas alcohólicas al momento del accidente. Fueron suspendidas hasta un año 1 204 licencias, 20 canceladas por reincidencia, y otros 35 casos derivaron en denuncias por estado de embriaguez.
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