En la provincia de Santiago de Cuba ascienden a 97 079 las personas en situación de vulnerabilidad –a las que se suman gestantes y niños con dietas de deficiencias nutricionales (bajo peso y talla)–, que han recibido módulos alimenticios compuestos, generalmente, por dos kilogramos de arroz, cuatro de granos, tres de pastas alimenticias y cuatro unidades de sardinas.
De acuerdo con Lisandra Cuevas Enrique, directora de Ventas de Mercancías del Grupo Empresarial de Comercio (GECI) del territorio, «nuestro Estado subsidia el almacenamiento, la distribución y entrega de estos donativos en las bodegas habilitadas al efecto en los nueve municipios».
También se ha entregado un grupo de donativos, con frecuencia bimestral, «a personas en situación de vulnerabilidad y a embarazadas, en coordinación con el Programa Mundial de Alimentos (PMA), que contiene arroz, aceite y granos», precisó.
Las oficinas del Registro de Consumidores (Oficoda) certifican la cantidad de embarazadas y de bajo peso. A partir del trabajo de las comisiones de atención y prevención social de cada municipio –encabezadas por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social–, la cifra de personas en situación de vulnerabilidad puede aumentar o disminuir.
Bajo el principio de que en Cuba nadie queda desamparado, «lo que implica un trabajo perfectible por el déficit de insumos, particularmente, para la canasta familiar normada, es que se suman estos donativos», afirmó la Directora de Ventas de Mercancías del GECI de Santiago de Cuba.
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