Las vacunas cubanas contra la COVID-19, Abdala y Soberana 02, ya son recibidas en los hombros del segmento infanto-juvenil de la hermana Nicaragua.
En esa nación centroamericana, la campaña nacional de vacunación contra la enfermedad se extiende ahora al segmento poblacional comprendido entre los dos y los 17 años de edad, tras la llegada, el día 20, de un cargamento de 1 200 000 dosis producidas por la industria biotecnológica de la Mayor de las Antillas.
Refiere un despacho de la agencia de noticias Prensa Latina, que en esa ocasión la ministra nicaragüense de Salud, Martha Reyes, calificó el envío de Abdala y Soberana 02 como un sueño alcanzado, al posibilitar la vacunación de un grupo de edad tan sensible como son los niños y adolescentes.
De igual modo, hizo énfasis en que el gobierno de Nicaragua insiste en emplear vacunas eficaces y seguras, cuya fabricación cumplan los estándares establecidos internacionalmente.
De forma paralela, en Nicaragua inició, además, la inmunización de las personas entre 18 y 30 años con la vacuna rusa Sputnik Light, de una sola dosis.
Durante el fin de semana y hasta esta fecha, el país recibió 3,2 millones de ese inyectable, anunció el viernes la vicepresidenta del gobierno, Rosario Murillo, según consigna Prensa Latina.
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