El 15 de noviembre será un día hermoso, ajeno a cualquier trama perturbadora de la tranquilidad ciudadana

Si hay una aplastante mayoría del pueblo cubano que refrenda fidelidad a la Revolución, es porque hay voces que lo validan, espontáneas, en cada rincón del archipiélago, como lo hicieron este viernes los vecinos del consejo popular de Pueblo Griffo, en la ciudad de Cienfuegos, o las mujeres reunidas en un teatro de Artemisa, en ambos sitios acompañados por la miembro del Buró Político del Partido y secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), Teresa Amarelle Boué.

A kilómetros de distancia entre uno y otro acto, quienes alzaron sus voces coincidieron en el rechazo absoluto a las pretensiones subversivas de una marcha anexionista, a las cuales respondieron, «para aclarar cualquier duda de desafectos e instigadores», que el 15 de noviembre será un día hermoso, ajeno a cualquier trama perturbadora de la tranquilidad ciudadana.

«En esa fecha abrirán las escuelas y volverán a las aulas nuestros muchachos, después de varios meses sin recibir clases presenciales; nadie va a empañar la alegría de la familia cubana», ratificó Amarelle Boué en Cienfuegos, y en Artemisa orientó que el proceso de apertura gradual a la normalidad, que iniciará el 15 de noviembre, «sea acompañado por el aporte creador de las mujeres».

En la jornada, la FMC dio a conocer un pronunciamiento, en el cual manifiestan que «nunca las cubanas aceptaremos que perturben la tranquilidad de nuestras calles, la seguridad de nuestros hijos e hijas, la felicidad de nuestro pueblo laborioso».

Expresión de compromiso y fidelidad, el documento patentiza que las calles, plazas y avenidas jamás servirán para que marionetas del imperio monten su teatro con una obra de falso patriotismo. «Por el contrario, esas calles se inundarán del verde olivo glorioso, del azul miliciano, del rojo vino de los uniformes escolares, del blanco de las batas sanitarias», afirmó la FMC.

«Cuba, orgullosamente libre y soberana, cuenta con el apoyo irrestricto de las mujeres», concluye el pronunciamiento.