Aunque entre los meses de mayo y agosto del presente año las precipitaciones en el país superaron la media histórica del periodo, los embalses de la Isla aún tienen «el agua a la cintura», pues apenas sobrepasan la mitad de su capacidad y la oferta insuficiente que Laura trajo los dejó todavía sedientos.
Hasta el pasado día 25, las presas cubanas acumulaban 5 068 millones de metros cúbicos, cifra que representa el 55 % del almacenamiento total, según reporte brindado a Granma por el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH).
De acuerdo con la fuente, 94 embalses muestran un llenado superior al 75 %, 86 retenían volúmenes inferiores a la mitad de su capacidad, y 36 guardaban menos de la cuarta parte.
Los ligeros beneficios asociados al paso de la tormenta tropical Laura, fueron más notables en Santiago de Cuba (con 99,2 millones de metros cúbicos acopiados) y en Granma (91,4 millones).
Otras 81 presas registraron algún incremento en su nivel, en tanto siete provincias, entre las que figuran Camagüey, Villa Clara y Matanzas, evidenciaban un descenso en sus reservorios.
Situada en Sancti Spíritus, la Zaza, la mayor de Cuba, con una capacidad de 920 millones de metros cúbicos, no tuvo ninguna recuperación asociada a Laura, pues las precipitaciones ocurrieron al sur de esa zona, precisó el máster en Ciencias Argelio Fernández Richelme, director de Hidrología e Hidrogeología del INRH.
Informó, además, que, de las 101 cuencas subterráneas principales de la Isla, 85 se encuentran en estado normal.
«La situación más desfavorable radica en las provincias de Artemisa, La Habana y Mayabeque, donde se localizan las cuencas Ariguanabo, Vento y Jaruco, que abastecen a la población de la capital. Estas, aunque han elevado sus reservas en las últimas semanas, todavía no alcanzan los niveles deseados para una adecuada extracción», detalló.
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Elpidio Valdivia dijo:
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28 de agosto de 2020
15:21:17
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