CAMAGÜEY. — Como para dejar bien claro el sentir de los 250 delegados a la Asamblea Provincial de la UJC, Doraine Linares Jiménez no dudó en ratificar: «Cada vuelta a la tuerca del bloqueo, lejos de amedrentarnos, nos hace más firmes, creativos y decididos a no renunciar jamás a tanta gloria conquistada».
La dirigente estudiantil puso el ejemplo del vínculo creciente de la comunidad universitaria con el pueblo, a través de proyectos socio-culturales, en el ejercicio de la docencia ante el déficit de maestros, la participación en programas económicos o en las acciones recuperativas tras el paso de poderosos huracanes.

Desde la Empresa Genética Rescate de Sanguily, en el municipio de Jimaguayú, Nayibis Fonseca Álvarez trajo también el mensaje de una masa juvenil que ha sabido ocupar un papel protagónico con su desempeño cotidiano en la formación y desarrollo de los sementales que necesita la ganadería del país.
«Se trata, expresó, de no conformarnos con ser simples espectadores, sino sentirnos parte activa de cualquier tarea que enfrente la entidad, lo mismo en la siembra de pastos y forrajes que en el alistamiento de nuevas yuntas de bueyes para su empleo en las actividades agrícolas ante el déficit de combustible».
Vivencias similares colmaron igualmente las mochilas de los delegados del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, la camaronera Cultisur o el Hospital Manuel Ascunce Domenech, todos prestos a demostrar que la juventud no está perdida, como pretenden hacer creer los medios al servicio del imperialismo.
«Esas son las historias que deben aparecer en las redes sociales», comentó Jorge Enrique Jerez Belisario, al referirse a la manipulación, distorsión y tergiversación de la realidad cubana, dirigida a confundir, desinformar, generar desaliento y fracturar la unidad forjada en más de 60 años de Revolución.

Los jóvenes coincidieron en la necesidad de cerrar todas las brechas posibles al pesimismo, el desánimo, la indiferencia, el desorden, la indisciplina y cualquier otra manifestación ajena a la conducta que debe prevalecer en una sociedad que dignifica y promueve los mejores valores en los seres humanos.
«Para ello, precisó Susely Morfa González, primera secretaria del Comité Nacional de la UJC, se requiere de una organización fuerte, cohesionada y combativa, que se haga sentir cada día a partir del ejemplo y la actuación de sus militantes en las fábricas, universidades, cooperativas, hospitales y centros de investigación.»
Al término de la sesión plenaria, se dieron a conocer los 48 delegados que representarán a Camagüey en el ya próximo XI Congreso de la UJC y fue presentado, además, el nuevo Comité Provincial de la organización, que a partir de ahora estará encabezado por la joven Kelly Álvarez Fernández.
Compartieron los debates y certeros análisis con la entusiasta muchachada camagüeyana Jorge Cuevas Ramos, miembro del secretariado del Comité Central del Partido; Ariel Santana Santiesteban, su primer secretario en tierra agramontina; y Yoseily Góngora López, gobernadora provincial.
COMENTAR
Responder comentario