Motores eléctricos: respuesta efectiva a la sustitución de importaciones

Orientada a la sustitución de importaciones y vinculada con el programa de producción local de materiales de la construcción, la unidad empresarial de base (UEB) Augusto Fajardo Pi prosigue la fabricación de motores eléctricos a partir del uso de láminas de acero al silicio y aluminio, provenientes de transformadores en desuso comprados en establecimientos dedicados a la recuperación de materias primas.

A las 150 unidades de 5,5 hasta 7,5 KiloWatts (kW) entregadas el pasado año, cuando asumieron el osado procedimiento fabril, agregarán en el transcurso de 2019 cerca de 200 de igual gama para su instalación en molinos trituradores de piedras y otros tipos de máquinas.

Según información ofrecida por Alberto Fernández Rodríguez, jefe del Grupo de Producción del establecimiento perteneciente a la Empresa Mecánica Holguín, el motor de 5,5 kW está validado mediante una certificación emitida por especialistas del Laboratorio Eléctrico de la Universidad de Camagüey, con el cual se hacen coordinaciones para evaluar el motor de 7,5 kW.

Actualmente avanza el proyecto orientado a la fabricación de motores de 2,2 a 3 kW, trifásicos, de 1 200 a 3 500 revoluciones por minuto, con voltaje de alimentación de 220 a 440, aptos para colocar en brazos pulidores de baldosas, zarandas vibradoras y máquinas productoras de bloques, ente otros medios.

También se evalúa, dijo, la posibilidad de utilizarlos en beneficio de la agricultura, en sistemas de riego.
Sobre la recuperación de motores eléctricos de diferentes gamas, otra tarea priorizada por la ueb, explicó que el pasado año la cifra ascendió a 2 000, lo que evitó al país la erogación de divisas al no tener que comprar en el exterior equipos de igual tipo.