Una institución que funde modernidad y tradición

Síntesis de historia; cuna de personalidades que marcaron la tradición patriótica, cultural y científica de la Patria; cimiento de cubanía; casa grande del conocimiento; todo eso y más es la Universidad de La Habana (UH), y por ello la multiplicación de la dicha cuando este viernes celebró su aniversario 290 en acto desarrollado en la emblemática Aula Magna.

El momento fue propicio para enviar al General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, un reconocimiento con la frase del líder de la Revolución «...aquí me hice revolucionario», y que recibió, de manos del doctor Gustavo Cobreiro, rector del centro, el miembro del Buró Político Miguel Díaz-Canel Bermúdez, primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros.

De igual forma, Cobreiro entregó distinciones a varias instituciones y organizaciones que han contribuido al desarrollo de la Colina Universitaria. También, en tributo merecido a sus estudiantes y profesores, la UH fue homenajeada por organismos y otras casas de altos estudios.

Hoy la universidad se erige como una institución moderna, pero que al mismo tiempo preserva sus más raigales tradiciones. Nuestra razón de ser fundamental es formar profesionales altamente calificados para que aporten al desarrollo económico y social de la patria, dijo en las palabras centrales el rector del centro.

La doctora Francisca López Civeira, profesora emérita, expresó que la UH «tiene que recordar a Fidel», pues aquí se formó profesionalmente, como líder, y regresó para intercambiar con profesores y estudiantes. El presidente nacional de la Federación Estudiantil Universitaria, Raúl Alejandro Palmero, afirmó por su parte, que la juventud de hoy está en la primera línea de las tareas del país.