Irma aún no se hace sentir con fuerza en el balcón del Oriente

Las Tunas.–Desde horas de la madrugada de este viernes comenzó a llover en todo el territorio tunero, aunque no se reportan, hasta este minuto, acumulados significativos ni penetraciones del mar.

A la espera de que puedan deteriorarse las condiciones climatológicas, en la provincia se extreman las medidas, fundamentalmente para garantizar la protección de vidas humanas. Hasta las 6 de esta mañana, alrededor de 136 700 personas se encontraban evacuadas. De ellas, 14 187 en 65 centros acondicionados al efecto, y más de 122 500 en hogares de familiares y vecinos.

Importantes elementos organizativos fueron evaluados en la más reciente reunión del Consejo de Defensa Provincial (CPD), donde su presidente Ariel Santana Santiesteban insistió una vez más en la importancia de mantener la comunicación entre grupos y subgrupos, y en la necesidad de ser disciplinados y estrictos en el cumplimiento de las tareas previstas.

Con el fin de garantizar la alimentación del pueblo, se han acopiado y trasladado hasta los mercados de todo el territorio, más de 3 000 quintales de productos agrícolas. Asimismo, se produjeron y comercializaron tres toneladas de galletas, y más de 100 000 raciones de dulces secos se pusieron a disposición de los evacuados.

Otras medidas destacables son la evacuación de 24 712 cabezas de ganado, así como el traslado a resguardo de todos los equipos de riego, molinos y la protección de casas de cultivos. Por otra parte, se movieron, en respuesta a necesidades de la provincia, 28 grupos electrógenos y seis fueron trasladados por cuestiones de seguridad. Vale destacar que todos estos equipos dispuestos para emergencias, cuentan con una cobertura de combustible para aproximadamente diez días.

En el caso de los recursos hídricos, se informó en el marco del CDP, que los embalses de la provincia se encuentran hoy al 24 % de su capacidad. En especial los del norte, no sobrepasan el 20 %, por lo que se encuentran en condiciones de asimilar altos niveles de lluvia.

Mientras Irma se acerca al territorio tunero, el pueblo se mantiene informado, y cumple disciplinadamente las orientaciones recibidas por diversas vías.